Según indicó Vallvé, este objetivo debe plantearse como un paso para conseguir más representatividad en la realidad plurinaciona del Estado a nivel internacional. En este sentido, se mostró partidario de que la representatividad se de especialmente en los organismos culturales, aunque sin que esto signifique un conflicto con la actual representación estatal.

El comisionado precisó que "no es en el sentido de querer romper el actual sistema de representación sino de reconocer una presencia diferenciada, o que la representación pueda recoger la pluralidad del Estado". A su juicio, esta presencia sería necesaria tanto en "organisos no gubernamentales como en los internacionales, sobre todo en aquellos que tienen mayor incidencia de tipo cultural, como la UNESCO".

Joan Vallvé aseguró que las relaciones exteriores han dejado de ser un monopolio del Estado y del Ministerio de Asuntos Exteriores dentro del actual sistema internacional, y defendió la actuación exterior del Gobierno de la Generalitat con el objetivo de afirmar la identidad catalana fuera de las fronteras.