Así lo reivindicó en la clausura de los Premios Procura, donde explicó que la independencia de los jueces y magistrados, así como del Tribunal Constitucional, está reconocida en los artículos 117 y 159 de la Constitución.

El presidente del TC hizo un llamamiento claro y conciso a todos los poderes públicos e instituciones del Estado: “Respetémonos entre nosotros, respetemos la Constitución, así como al Parlamento y a nuestro sistema judicial y hagamos valer la legitimidad democrática de la que gozamos”.

En su discurso, defendió la Constitución de 1978, que garantiza un sistema político democrático con alternancia en el ejercicio del poder con “absoluta naturalidad” que permite que los diferentes partidos elegidos por los españoles desarrollen sus respectivos programas de gobierno con normalidad.

Se trata, insistió, de un marco que ampara la convivencia de todos los ciudadanos, incluso de quienes no participan en sus valores y querrían sustituirlos por otros.

Por ello, el Tribunal Constitucional, destacó su presidente, “continuará incansablemente con su labor de defensa de la Constitución, como guardián de la libertad e intérprete supremo de los derechos fundamentales”.

Conde-Pumpido puso en valor la figura del procurador, un cooperador de la Administración de Justicia, pieza imprescindible del sistema judicial. En este sentido, subrayó la necesidad de diálogo entre administraciones y corporaciones, así como la responsabilidad de todos los poderes públicos a la hora de contribuir a la mejora del sistema.

El evento, organizado por el Colegio General de Procuradores de España y por el Ilustre Colegio de Procuradores de Madrid y al que asistieron numerosas autoridades del ámbito jurídico, reconoció con la Balanza de Oro de la Justicia al expresidente de la Audiencia Nacional José Ramón Navarro Miranda, y con el Premio Convivencia y Tolerancia a la presidenta del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Isabel Perelló Doménech.