En un comunicado de prensa, la FEV informó hoy de que en los 12 meses estudiados, las ventas totales de caldos en España alcanzaron los 1.220 millones de litros, de los que 534,6 millones (43,8%) se consumieron en los hogares y los 685 millones restantes (56,2%) se vendieron en los diferentes establecimiento.

Por canales de venta, el consumo en hogares experimentó un descenso del 5,3%, mientras que en bares y restaurantes cayó un 2,1%. Estas disminuciones se suman a las acumuladas en los últimos años y que llegan a suponer, según la FEV, una pérdida en el sector de 152 millones de litros respecto a diciembre de 1999.

En cuanto a los productos, el vino de mesa, con 814 millones de litros consumidos en el periodo estudiado, representó un 67% del total de consumo nacional, seguido por los caldos con deominación de origen con 352 millones (27%) y los espumosos y cavas con el 6,6% del vino consumido en España.

VINO DE MESA

De todos ellos, los únicos que han mantenido "tendencias positivas de consumo" fueron los de denominación de origen, al ganar 20 millones de litros con respecto a las cifras registradas en diciembre de 1999. Sin embargo, no llegan a compensar la caída de 70 millones de litros experimentada por los vinos de mesa.

Finalmente, la FEV señaló que los descensos acumulados en el cosumo de los caldos "indican un cambio de tendencia" de los hábitos alimenticios de los españoles, con menos comidas en el hogar y menor tendencia a acompañarlas con vino.

"Para invertir la tendencia, estamos gestionando un programa de promoción nacional que forme e informe sobre los efectos beneficiosos de este producto", concluyó la Federación.