El sindicato denunció en un comunicado la incertidumbre con la que viven los trabajadores, ya que carecen de información oficial y sólo se enteran de los avances a través de los medios de comunicación.

Ante esta situación, CSIF reclamó “una comunicación eficiente, clara y transparente en todos los procesos” para disipar las dudas y garantizar la estabilidad laboral.

Asimismo, reclamaron más claridad sobre los aspectos pendientes y respuestas a las inquietudes de los empleados.

El sindicato precisó que la demora en el proceso de venta de Talgo está generando graves perjuicios en el funcionamiento de la compañía, y citó los daños económicos para la plantilla por las sanciones impuestas “por Renfe en 2024 como penalización por los retrasos en la entrega de los trenes Avril”.

“Esta multa, que consideramos desproporcionada e injusta, significó una pérdida de aproximadamente 10 millones de euros en variables para el personal; a los que podrían sumarse otros 10 millones de euros -también en variables- teniendo en cuenta los resultados de la compañía en el primer semestre”, avisaron en el comunicado.

En este sentido, también continúa parada la venta de 20 trenes al consorcio Saudi Arabia Railways para la línea de alta velocidad entre Medina y La Meca.

El pasado 14 de febrero se firmó un principio de acuerdo para vender el 29,77% de Talgo que poseía el fondo Trilantic al consorcio vasco liderado por Sidenor, y en el que también participan el fondo público vasco, Finkatuz, y las fundaciones Vital y BBK.

CSIF ya salió a la calle el pasado 3 de junio, frente al Ministerio de Transportes, para exigir al Gobierno una solución inmediata que garantice el futuro y la estabilidad de Talgo y de sus trabajadores.