Por el contrario, y en manifestaciones a la Cadena Cope, dijo que duda "mucho de que todo esto vaya a constituir inmediatamente ningún cambio espectacular", y auguró que, por el contrario, ese país seguirá "su proceso normal".

El prelado subrayó quees muy importante que la Iglesia pueda ejercer una misión educadora y de reconciliación en Cuba, aunque reconoció que el régimen castrista es muy resistente a cualquier tipo de cambio.

Asimismo, indicó que Juan Pablo II difundirá un mensaje de esperanza, invitando a todos al mutuo respeto y a la defensa de los derechos humanos.