Además, la portavoz del PP en el Congreso, Ester Muñoz, recalcó en una rueda de prensa en la Cámara Baja que “se ha puesto manos a la obra” para cambiar unos protocolos que “llevaban en marcha desde 2012, cuando estaba gobernando el PSOE” en Andalucía.

La dirigente popular sostuvo ante la prensa que es “inevitable” para un Gobierno que haya “problemas de gestión”, pero subrayó que la “cuestión clave” que “diferencia a unos de otros” es cómo se responde a las adversidades y respaldó la iniciativa de Moreno.

“En el Gobierno de Juanma Moreno se está respondiendo dando explicaciones con transparencia y cambiando los protocolos. En el Gobierno de España, la ministra Redondo, cuando conoció lo que estaba pasando con las pulseras, lo tapó durante un año y después ha estado mintiendo hasta el día de ayer, que creo que es cuando ha reconocido por primera vez que sí que ha habido absoluciones de hombres porque no funcionaban las pulseras”, expuso.

“Por lo tanto, lo importante ante un error en una administración, que es algo que puede ocurrir, es cómo te enfrentas a él y cómo lo resuelves. El Gobierno de este país lo que hace es mentir, tapar y acusar a los demás, y yo creo que es una gran diferencia”, añadió.

Muñoz, sin embargo, no hizo ninguna valoración de la actuación de la consejera de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía, Rocío Hernández Soto. La oposición reclama su cese o dimisión.