Además de deicarse a la extorsión, los 15 detenidos desarrollaban diferentes actividades delictivas, como el proxenetismo, robo y venta de vehículos de lujo, falsificación de documentos y robos en domicilios.

Las investigaciones se iniciaron cuando la Guardia Civil recibió una llamada en la que se informaba de una pelea entre veinte individuos provistos de bates de beisbol y armas blancas y otras ocho personas, en la localidad alicantina de Formentera del Segura. Una vez en el lugar de los hechos, se comprobo quetodos los individuos eran de origen lituano.

A partir de ahí, la Guardia Civil abrió una investigación que condujo al desmantelamiento de una red denominada "Panevezhis", compuesta por 30 personas de origen lituano que actuaban en la zona sur de las provincias de Alicante, Murcia y Almería.

La organización ofrecía a determinadas obras la posibilidad de contratar a lituanos con estancia irregular en nuestro país. En un primer momento, el salario de estos trabajadores era cobrado por miembros de laorganización.

Cuando varios de los contratistas decidieron pagar directamente a los obreros, los miembros de la organización los amenazaron de muerte, al igual que a los ciudadanos lituanos que se establecieron por su cuenta.

La Guardia Civil pudo comprobar que este suceso no era una excepción, ya que se habían dado casos idénticos en la localidad de Torrevieja.

Por otro lado, esta organización captaba a mujeres del Este, para trabajar en España como prostitutas. Una agencia en San Petersburo se encargaba de tramitar los documentos y de la obtención de los pasajes para venir a nuestro país.

Las mujeres eran recibidas en Madrid por ciudadanos rusos, que las trasladaban a diferentes clubes de Alicante y Barcelona.