Miles de ciudadanos, hasta 100.000 calculaba el Ayuntamiento de Madrid, se agolparon desde primera hora detrás de las vallas a lo largo de todo el recorrido del desfile por el Paseo del Prado y de Recoletos, muchos con banderas de España, para presenciar el desfile y disfrutar del paso de los aviones, los vehículos y las unidades presentes.

Un total de 4.177 militares, 142 vehículos y 86 aeronaves desfilaron con un ritmo cronometrado al segundo, en el que no faltaron momentos emotivos como el Homenaje a los Caídos por España, emocionantes como el salto de la cabo paracaidista María del Carmen Gómez Hurtado la bandera de España y simpáticos, como el paso de la Legión con su mascota, el chivo ‘Pacoli’.

El acto arrancó a las 11.00 horas con la llegada de los Reyes y de la princesa Leonor a la Plaza de Cánovas del Castillo, donde fueron recibidos con honores militares. A continuación, Felipe VI, acompañado del jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad), almirante general Teodoro López Calderón, pasó revista al Batallón de Honores.

Durante el acto, los Reyes y la princesa de Asturias, con uniforme de gala del Ejército de Tierra, estuvieron acompañados por el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez; la presidenta del Congreso, Francina Armengol; el presidente del Senado, Pedro Rollán; la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles, y todos los ministros y ministras del Gabinete.

Las excepciones fueron la ministra de Igualdad, Irene Montero, que se encuentra en Chile para asistir a la sesión de Consideración y Aprobación de los Acuerdos de la Conferencia Regional sobre la Mujer de América Latina y el Caribe (Cepal). De igual modo, la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Asuntos Económicos y Transformación Digital, Nadia Calviño, no acudió ya que se encuentra en Marrakech (Marruecos) con motivo de las Asambleas Anuales del Fondo Monetario Internacional (FMI) y del Banco Mundial.

ABUCHEOS A SÁNCHEZ

El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, no pudo evitar de nuevo que algunos grupos del público asistente pitara a su llegada y salida, además de proferir gritos tales como “fuera, fuera”, “Sánchez dimisión”, Puigdemont a prisión” y el polémico “que te vote Txapote”, denostado por las víctimas del terrorismo.

A pesar de ello, el acto celebrado en un día soleado y con el cielo sin nubes fue solemne y realmente aplaudido por la mayoría de asistentes. La celebración de este año ha coincidido con el 35 aniversario de la entrada de la mujer en las Fuerzas Armadas españolas. Asimismo, se conmemora el 50 aniversario de la creación del Servicio Aéreo de la Guardia Civil, el 525 aniversario de la Compañía de Mar de Melilla y el 450 aniversario del Regimiento de Infantería ‘Canarias’ nº 50.

ACTITUD CASTRENSE

Uno de los instantes más señalados fue el Homenaje a los Caídos por España, en el que, por primera vez, Felipe VI, que lucía el uniforme de capitán general del Ejército del Aire, lo realizó acompañado de su hija, la heredera de la Corona, que está llamada a ostentar la jefatura del Estado y de las Fuerzas Armadas.

Con una marcada marcialidad, la dama cadete Leonor de Borbón y Ortiz se cuadró y saludó en varios instantes ante la bandera, y durante la interpretación del himno de España y la oración a los caídos.

La princesa, que ingresó el pasado 7 de agosto en la Academia General Militar de Zaragoza, se mostró en todo momento con confianza y siguió todo el desfile de pie, a la derecha de su padre, el Rey, mientras que la reina permanecía sentada como el resto de autoridades al paso de las unidades.

VOCES DISONANTES

Como es habitual, las autoridades locales y autonómicas, además de muchos líderes parlamentarios asistieron a la conmemoración, salvo los presidentes del País Vasco, Iñigo Urkullu, y de Cataluña, Pere Aragonès, algo que es ya habitual.

De entre las ministras de Podemos en el Ejecutivo, la titular de Derechos Sociales en funciones, Ione Belarra, señaló en sus redes sociales que España “debería plantearse seriamente dejar de conmemorar su día nacional en el aniversario de un genocidio contra los pueblos de América Latina”. Pese a ello, después acudió a presenciar la parada militar.

Belarra quiso protagonismo, ya que vistió durante la jornada un pañuelo bordado por mujeres palestinas de la ciudad de Hebrón, una de las más asediadas por Israel en los últimos años, según informaron fuentes de Podemos

Con ello quiso mostrar su solidaridad con el pueblo palestino “ante el apartheid continuado al que está sometido por Israel y ante el recrudecimiento de la violencia de los últimos días”, subrayaron las mismas fuentes.