Según informa la Policía este martes, los detenidos contactaban con sus víctimas a través de la oferta de servicios de reparación de tejados, después se presentaban en las viviendas con uniformes de trabajo y furgonetas rotuladas para poder aprovechas la confianza empresarial. Los supuestos trabajadores redactaban un presupuesto que no llegaba a entregarse y nunca finalizaban las reformas prometidas.

La investigación comenzó cuando uno de los casos ocurridos en Chamartín llegó a oídos de la Policía, en este caso, la víctima era una mujer de edad avanzada que contrató a los criminales para la reparación de goteras en su tejado.

Los detenidos elaboraron un presupuesto escrito, que nunca entregaron a la víctima, en el que pedían 9.000 euros en efectivo por la obra. Una vez finalizada la supuesta reforma, acompañaron a la mujer a la sucursal bancaria para retirar el dinero y se marcharon antes de dar opción a la víctima de solicitar justificante del pago ni de la obra.

Días más tarde, la mujer observó que las goteras por las que había contratado el servicio no estaban reparadas y que los empleados no habían vuelto para finalizar su trabajo. La Policía localizó a finales de febrero en Segovia a los cuatro varones implicados, están acusados de los delitos de estafa y pertenencia a un grupo criminal.