Las investigaciones comenzaron tras personarse en el Puesto de la Guardia Civivl de Rivas-Vaciamadrid el representante de una empresa de alquiler de coches que presentó denuncia contra varios clientes porque no habían pagado el importe de los servicios prestados.

Los agentes iniciaron las acciones correspondientes contra estos clientes, que manifestaron haber pagado el dinero por el alquiler de los vehículos. Ello motivó que la investigación se centrase en un empleado del establecimiento con el que todos los clientes habían contratado los alquileres.

El trabajador argumentaba diferentes excusas a los clientes para que no pagaran con tarjeta, y así poder quedarse con el dinero y culpar a los clientes de no cumplir con su compromiso de pago. Para camuflar su engaño y no levantar sospechas entre los clientes, emitía facturas falsas.

Una vez detectado el modus operandi, la Guardia Civil ha podido localizar nuevas falsificaciones con las que simulaba repostajes de vehículos o alquileres a personas inexistentes mediante documentación falsa, siempre para quedarse con el importe correspondiente.

Por todo ello, los agentes detuvieron el pasado martes a este empleado, F.J.B.P., por los delitos de falsedad documental, hurto, usurpación de estado civil y apropiación indebida. En total, el detenido, que pasó ayer a disposición judicial, consiguió estafar más de 12.300 euros, descubriéndose que se había quedado también con 500 euros de la caja.