Según relató la mujer, sobre las diez de la noche de ayer, Mohamed Charhouaqui llegó a la casa y al comprobar que estaba sola la obligó a desnudarse, bajo amenazas la muerte, al tiempo que le mnifestó repetidamente su deseo de violarla.

La víctima ofreció resistencia y pidió auxilio. Sus gritos fueron escuchados por los vecinos, que acudieron en su ayuda y retuvieron al marroquí hasta la llegada de un vehículo radiopatrulla del Cuerpo Nacional de Policía.

Trasladados a la comisaría de Chamartín, se comprobó que ni el agresor ni la mujer tienen antecedentes policiales. Mohamed Charhouaqui pasó hoy a disposición judicial.