"Sólo pedimos lo que es de justicia. Nuestra actividad es muy vulnerable a las subidas en los precios de los carburantes, ya que los vehículos son imprescindibles en la enseñanza de la conducción. El gasóleo y la gasolina representan una parte muy significativa de los costes que soportan nuestras pequeñas empresas», indicó Lorca en declaraciones facilitadas por la CNAE.

Lorca añadió al respecto: "sin la ayuda de los 20 céntimos peligran muchas autoescuelas y no olvidemos que en este país viven directamente de la formación vial 35.000 familias. Ahora bien, nuestro sector es clave para la seguridad vial y, si me apuran, para la conservación del tejido social, sobre todo, en la España vaciada", subraya.

La CNAE trasladó el pasado 15 de diciembre al director general de Transporte Terrestre, Jaime Moreno, que las autoescuelas son un elemento auxiliar y fundamental para el transporte, pues preparan a los futuros conductores profesionales y desempeñan un papel crucial en la impartición del Certificado de Aptitud Profesional (CAP), indispensable para quienes puedan ejercer como tales.

"Nos quejamos de que faltan conductores de vehículos pesados, pese a que hay mucho paro. Contribuiría a la solución de este problema que las autoridades nos facilitasen la labor», concluyó Lorca.