Así lo indicó Muñoz en una carta publicada en sus redes sociales, donde asegura que en las últimas semanas formó parte de las negociaciones que, “de cara afuera”, aspiraban a conformar una candidatura “de unidad” que pudiera evitar unas primarias que podían desencadenar “una guerra interna” al enfrentarse Arrimadas y el portavoz adjunto en el Congreso, Edmundo Bal.

Muñoz asegura haber “luchado hasta el final” por asegurar que esa candidatura fuese “realmente” integradora. Sin embargo, lamenta que la candidatura “de unidad” que se ha conformado en los últimos días, la de Arrimadas, “no responde” a lo que necesita el partido para ilusionar en las próximas elecciones.

“Yo misma creí que era posible, y trabajé hasta la saciedad porque funcionara”, asegura. Pese a ello, señala que comprobó que esa lista, “auspiciada y controlada” por Arrimadas y su equipo, “no es realmente fiel a todo ese trabajo que tanto nosotros como los afiliados hemos realizado durante tantos meses” que ha durado el proceso de refundación.

“Una refundación que venía a cuestionar todo, menos nuestros valores y principios, ha acabado cuestionando únicamente nuestros valores y principios para ser un instrumento personal para mantener el poder de unos pocos”, lamenta. Por ello, subraya que no puede formar parte de este “trampantojo”.

“Sé cuándo un proyecto por el que estoy trabajando está siendo utilizado por otras personas con un fin diferente al declarado”, añade en la carta Muñoz, quien comenta que estos son los motivos por los que ha decidido no formar parte de la lista de la líder del partido de cara a las primarias del 9 y de 10 enero.

Además, apunta que la fórmula de Arrimadas, “en la que nuestro proyecto está más preocupado por la imagen de nuestros líderes y por lo que otros partidos piensan de nosotros que por defender activamente nuestros principios de libertad e igualdad de oportunidades, nos ha hecho llegar a la situación en la que estamos hoy”.

Por ello, insiste en que no será parte de ningún proyecto “cuyo único fin es asegurar el sillón y el sueldo de ninguna persona”. Dice que no va a ser parte de ninguna candidatura, por lo que tampoco estará entre las personas que formen la lista del portavoz adjunto de Ciudadanos en la Cámara Baja.

Pese a todo ello, asegura ser “optimista” y cree es posible “volver a conectar” con los votantes, aunque aclara que hoy sabe que eso no será con esa candidatura “impulsada, usurpada y tutelada” por Arrimadas. “Esa candidatura no representa lo que durante tanto tiempo tantos afiliados trabajamos durante la refundación liberal”, concluye.