En una entrevista que publica el boletín informativo del Instituto de España, González de Amezua afirma que en las iglesias no se hacen conciertos habitualmente como en otros países europeos, "porque aquí la jerarquía eclesiástica, muchas veces y sin señalar a nadie, decide que las iglesias no son nada más que centros de culto y que, por tanto, no hay que hacer conciertos".

González de Amezua, que es musicólogo y organista, asegura que la Academia de Bellas Artes ha intentado impulsar la celebración de conciertos de ese tipo, "pero con la Iglesia hemos topado".

"La Iglesia española está ahora en un momento complicado y difícil", afirma el académico, quien considera que el clero nunca ha tenido una gran preocupación por la música religiosa, "pero ahora menos", y eso se traduce en que el panorama de este género musical atraviese en España un momento "fatal".