DURANTE 1991, MAS DE 80.000 TRABAJADORES RESULTARON HERIDOS EN ACCIDENTE LABORAL EN LA COMUNIDAD DE MADRID

MADRID
SERVIMEDIA

Durante l pasado año, un total de 80.639 trabajadores resultaron heridos en accidentes laborales en la Comunidad Autónoma de Madrid (CAM), unos 6.000 menos que en 1990, según un informe de la Unión Sindical de Madrid Región de CCOO, al que ha tuvo acceso Servimedia.

El estudio de la central, basado en datos del Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo, refleja un ligero descenso de la siniestralidad laboral en la región, aunque, a juicio del sindicato, las tasas actuales son todavía elevadas. Desde 1988, los accidentes laborales en la comunidad madrileña se incrementaron en más de un 20 por ciento, situando a la región en el tercer lugar en siniestralidad laboral de España, por detrás de Cataluña y Andalucía.

En total, durante 1991 fueron 87.772 los trabajadores que resultaron heridos en la comunidad, de los cuales 7.133 sufrieron el accidente cuando se dirigían a sus puestos de trabajo, 5 menos que en el año anterior.

El número de accidentes mortales, a pesar de que también experientó un leve descenso (15 menos), se elevó a 248 personas: de ellas 154 fallecieron en accidente en el trabajo, mientras que 94 murieron en el trayecto hacia su puesto laboral.

Para CCOO, esta mejora en la siniestralidad laboral es consecuencia de la insistente demanda de los sindicatos para la adopción de medidas preventivas de riesgos laborales, así como a las constantes denuncias de estos hechos realizadas por los medios de comunicación y por la central.

Asimismo, considera que otro de los facores que han hecho posible este descenso del número de accidentes son las actuaciones sindicales realizadas en materia de salud laboral en diversos sectores, pero, especialmente, en el de la construcción, lo que ha desenvocado en un incremento del número de inspectores laborales destinados a ese ramo.

También señala que los cambios habidos en la Dirección Provincial de Trabajo y Seguridad Laboral y en la Jefatura de la Inspección Provincial han hecho posible unas actuaciones más firmes y más sensiblesrespecto a la salud laboral y las condiciones de trabajo.

CIFRAS DRAMATICAS

Sin embargo, a pesar de esta mejora, la central afirma que "hay mucho camino que recorrer", ya que, a su juicio, el descenso de los accidentes puede deberse a una disminución del número de trabajadores, y, a pesar de ello, las cifras actuales son todavía "dramáticas".

Por sectores, fue el de servicios, al igual que en 1990, el que registró el mayor número de accidentes laborales, un total de 33.998, así como de muertes n el trabajo, que ascendieron a 73, experimentando, no obstante, un descenso respecto al año anterior, en el que 101 trabajadores perdieron la vida.

También el número de accidentes en los ramos de la construcción, con 15.790; agricultura, con 669, e industria, con 30.587, tuvieron un ligero receso, mayor en el caso del sector de la industria, en el que hubo casi 4.000 siniestros menos que durante 1990.

Sin embargo, también fue ese mismo sector el único en el que el número de trabajadores fallecids en accidente laboral sufrió un aumento respecto al año anterior, ya que durante 1991 murieron 45 personas, 8 más que en 1990.

En el ramo de la construcción, sector en el que la siniestralidad laboral aumentó más respecto a 1988 (un 28,8 por ciento), el número de muertes ascendió a 36, es decir, 7 menos que el año anterior y una menos que en 1988, mientras que en la agricultura no hubo ningún fallecido, frente a los tres muertos de 1990.

En opinión de CCOO, este análisis de la siniestralidad demestra que las causas de los accidentes laborales son, entre otras, el insuficiente marco legislativo, que no responde a la actualidad sociolaboral del país, la creciente precariedad del empleo y la falta de planes de formación adecuados.

Otro de los factores apuntados por la central como origen de la siniestralidad laboral son la falta de voluntad política para atajar este problema, la actitud insensible y antidemocrática de la patronal y la imposición de altos ritmos de trabajo, con condiciones laborles inadecuadas.

(SERVIMEDIA)
07 Mar 1992
S