Así lo explicó hoy en rueda de prensa el subsecretario del ministerio, Fernando Gurrea, quien calificó de "deficiente" la regulación que establecía que los profesores de religión no recibiesen indemnización al finalizar sus contratos temporales.

Esta explicación responde a la sentencia de la Audiencia Nacional que declara nula la cláusula que incluyen los contratos temporales que el Ministerio de Educación realiza a profesores de religión y que establece que a su finalización no procede indemnización alguna.

Gurrea explicó que la regulación actual en esta materia es de 1998 y se incluye en la Ley de Acompañamiento a los Presupuestos Generales del Estado. "La sentencia no es la primera, sino una más de un conjunto", añadió.

Agregó que el debate abierto por el ministerio en relación con la reforma educativa incluye el cambio de esa "deficiente regulación jurídica, para que, una vez subsanada, pueda culminarse el traspaso de competencias de estos profesores, que en algunas comunidades todavía dependen del Estado".