Hormaechea afirmó que todavía no ha tomado ninguna decisión y que está pendiente de obtener datos sobre la intención de voto de los cántabros, información que tendrá en su poder la próxima semana.

El presiente del Ejecutivo regional manifestó que su intención es que en estas elecciones generales el centro-derecha en la región obtenga los mismos resultados que en 1979, cuando se consiguieron tres diputados y tres senadores, "e incluso mejorarlos".

Respecto a algunas informaciones aparecidas en los últimos días sobre posibles presiones de Juan Hormaechea al PP para encabezar la lista del Senado por Cantabria, el presidente cántabro afirmó que ha mantenido contactos con los dirigentes populares en Madrid,"pero no he presionado. Ni siquiera me he planteado ir como senador, aunque en su momento se pudo haber hecho".

Hormaechea aseguró desconocer las declaraciones efectuadas por el presidente del PP, José María Aznar, en las que afirmaba que en el caso de que fuese el presidente cántabro habría dimitido. "Lo que está claro es que por unos carteles no se dimite", dijo.

Sobre las informaciones en las que se apuntaba la posibilidad de un pacto entre Juan Hormaechea y la agrupación Ruiz-Mateos para presntarse por esta formación en las próximas elecciones generales, dijo que son "una tontería, una estupidez, un intento de difamación".