Pco después comenzaba la larga espera que se presagiaba para los periodistas, que todavía tuvieron que aguantar más de tres horas para ver el primer cara a cara entre los dos candidatos.

Los representantes de la prensa, 162, entre redactores, fotógrafos, cámaras etc de distintos medios de comunicación de casi todo el mundo (Iran, Argentina, Gran Bretaña, etc), fueron pasando todos los filtros a los que les sometieron los responsables de seguridad de la emisora privada, hasta que llegaron a la sala de pensa.

Sin casi haber aterrizado en este lugar desde donde deberían seguir el debate, la atención de los medios de comunicación se centró en los canapés y bebidas que fueron circulando por la sala.

Entre canapé y canapé fue acercándose la hora de llegada de los Vips, citados en los estudios a las nueve de la noche.

Casi al mismo tiempo fueron llegando políticos como Fernando Morán y Loyola del Palacio, periodistas como José Luis Gutiérrez o Pedro J. Ramírez, y personas de la vida económica coo Manuel Pizarro.

Paralelamente, en la sala de prensa, los periodistas pasaron del canapé al bolígrafo entre fax y monitores. Ya faltaba poco para el tan esperado debate.