ELECCIONES VASCAS. IBARRETXE DICE QUE RESPETAR EL ESTATUTO ES ADMITIR LA POSIBILIDAD DE REFORMARLO
- Garaikoetxea advierte de que los nacionalistas no darán "ni un paso atrás" pese a la "cruzada inmisericorde" de que son víctimas
El texto se ha copiado correctamente en el portapapeles
El candidato de PNV-EA a la reelección como "lehendakari", Juan José Ibarretxe, dio hoy en Bilbao que respetar el Estatuto de Gernika es también admitir la posibilidad "legítima" de reformarlo.
Ibarretxe insistió en que la coalición que lidera respeta la legalidad vigente contenida en el Estatuto, pero a la vez defendió la legitimidad de su reforma, que está contemplada en el propio texto.
Ante decenas de cargos públicos del PNV, aseguró que ni el PP ni el PSOE respetan el autogobierno vasco, porque llevan 20 años poniendo obstáculos a su desarrollo pleno y tienen una visión crrada que les ha llevado a cometer "un fraude" respecto de las decisiones del Parlamento vasco, que reclamaba más autogobierno.
Frente a esta actitud, los peneuvistas se declaran respetuosos con las decisiones de la sociedad vasca, sean éstas favorables a mayor autogobierno o a una menor autonomía, y exigió a los constitucionalistas un compromiso similar.
A su juicio, tanta legitimidad tienen los constitucionalistas para defender su interpretación del Estatuto como tienen los nacionalistas para dfender su punto de vista.
Además, explicó, los nacionalistas deben sentirse orgullosos de su tarea en los últimos 20 años de gobierno, porque heredaron un país "hecho trizas" y han creado "riqueza y bienestar". Agregó que, aunque "nos falta la paz", el balance es positivo frente a los partidos de corte nacional, que han aportado "miseria y pobreza", tanto en lo económico como en lo social.
DEFENSA DEL AUTOGOBIERNO
El acto celebrado hoy en el Bilbao "en defensa del autogobierno" estuvo plagado d consejeros y altos cargos del PNV y EA. Pese a que se intentó reunir a los tres "lehendakaris" del PNV -Carlos Garaikoetxea, José Antonio Ardanza y el actual candidato a la reelección-, Ardanza no rompió su autoimpuesto alejamiento de la política.
El discurso de Garaikoetxea fue de reafirmación y orgullo, por los logros del nacionalismo en 20 años de gobierno, y de advertencia a los que comandan la "cruzada inmisericorde" contra el nacionalismo vasco que de "no vamos a dar ni un paso atrás".
Expicó que en el momento de llegar al Gobierno, el PNV encontró un País Vasco en plena crisis económica, con su cultura y su lengua en "estado de postración", sometida al "expolio fiscal" del Gobierno central y con una sociedad desesperanzada.
El nacionalismo trajo, según dijo, "recuperación económica y del bienestar y autogobierno", y es precisamente profundizar en esos dos terrenos lo que quieren seguir haciendo. "Nuestro proyecto no es una quimera, ni una ensoñación romántica", dijo, sino que es una ralidad contrastable y comparable con lo hecho por sus oponentes constitucionalistas.
Garaikoetxea acusó a los no nacionalistas de no estar preocupados por el fin de ETA, sino obsesionados por la "existencia del nacionalismo vasco democrático" e interesados por silenciar la "indignación" con que viven el PNV y EA la actuación terrorista de ETA.
Denunció que ante las reivindicaciones "legítimas" del nacionalismo, siempre se han producido ofensivas "del pensamiento y de la pluma" ante las que "no no debemos acomplejar".
Juzgó que las promesas del candidato del PP, Jaime Mayor Oreja, están "vacías" y se preguntó quién puede creer que vaya a acabar con el terrorismo en 4 años como "lehendakari", si 6 años desde el Gobierno central no le han permitido terminar con el problema.
Arremetió contra el candidato popular por arroparse de políticos como Leopoldo Calvo Sotelo, impulsor de la LOAPA, o Silvio Berlusconi, "prototipo del neocaciquismo" e incurso en diversos procesos por corrupción, y señal que sus compañías describen bien cuál es "su modelo de libertad, democracia y autogobierno".
También desacreditó al candidato socialista, Nicolás Redondo Terreros, al que recordó que ocupaba cargos de responsabilidad en el PSOE mientras "algunos de sus compañeros organizaban el GAL y estaban envueltos en una orgía de corrupción". En consecuencia, aseguró que PNV-EA no aceptará lecciones de ética de quienes "no están cualificados para darlas".
(SERVIMEDIA)
30 Abr 2001
SGR