En línea con ese acuerdo, PPC pagó una contraprestación total aproximada de 1.240 millones de euros, equivalente a un valor empresarial de unos 1.900 millones de euros (al 100%). También está previsto un mecanismo de ganancia relativo a un posible pago posterior al cierre, basado en el valor futuro del negocio minorista.

La transacción global, excluyendo el posible 'win-out', generó un efecto positivo en la deuda neta consolidada del Grupo de alrededor de 2.080 millones de euros en 2023, que incluye la entrada en efectivo de alrededor de 200 millones de euros de dividendos extraordinarios, lo que se suma al efecto positivo de unos 85 millones de euros ya generados en 2022.

La transacción también produjo un impacto negativo acumulado para 2022-2023 en los ingresos netos declarados del Grupo que asciende a 1.398 millones de euros, de los cuales 777 millones de euros en 2023 (incluidos 655 millones de euros relacionados con la liberación de la reserva de divisas).

Por el contrario, la transacción no tiene impacto en los resultados económicos ordinarios del Grupo. La venta está en línea con las Prioridades Estratégicas del Grupo, que prevén el reposicionamiento de Enel en países donde el Grupo tiene un mayor potencial de crecimiento, así como una presencia integrada, a saber, Italia, España, Estados Unidos, Brasil, Chile y Colombia.

El Grupo Enel ha sido un actor energético líder en Rumania desde 2005, operando en distribución de energía con alrededor de 3,1 millones de clientes en tres áreas clave del país, a saber, Muntenia Sud (incluyendo Bucarest), Banat y Dobrogea; suministro, provisión de electricidad, gas natural y servicios de valor agregado; energías renovables, con alrededor de 600 MW de capacidad; y servicios energéticos avanzados, como servicios domiciliarios, generación distribuida, eficiencia energética y movilidad eléctrica.