La central que más sucesos registró en el citado periodo fue la de Trillo (Guadalajara), con 44. De estos, 28 se clasificaron dentro de la escala de incidentes, que los clasifica de 0 a 7 e función de su gravedad.

En Trillo se produjo el único accidente clasificado en el nivel 2 (el 0 es el de menor gravedad) en las nucleares españolas entre 1992 y 1994.

Cofrentes (Valencia) notificó 41 incidencia, una de las cuales se clasificó en el nivel 1 y Vandellós II sufrió 34, una de ellas también registrada en el nivel 1.

Los dos reactores de Ascó (Tarragona) sufrieron 34 sucesos y los dos de Almaraz (Cáceres) 23. Las más antiguas, Santa María de Garoña (Burgos) y Zorita (Guadalajara)notificaron 25 y 11 incidentes, respectivamente, si bien hay que tener en cuenta que Zorita permaneció parada en 1994 desde el mes de enero.