En concreto, el Gobierno de Salvador Illa llevará mañana al Consejo Ejecutivo un nuevo texto que incluye “las demandas y exigencias” de ERC para garantizar el “equilibrio entre la necesaria aceleración del despliegue de las renovables y el consenso y la participación del territorio”, después de que el decreto inicial no prosperase por falta de apoyo de los republicanos.

Así lo anunció en rueda de prensa el diputado de ERC Jordi Albert, quien explicó que su partido negoció para que el decreto responda a los objetivos que tenía su partido, uno de los cuales era que “el despliegue se haga con el consenso territorial, de acuerdo con el mundo local, que ahora tendrá mecanismos de participación”.

En segundo lugar, apuntó que el nuevo texto “desincentiva el paso directo del suelo agrario a suelo para renovables” y promueve que se instalen en suelo industrial y urbanizable, blindando de esta manera el suelo agrario. Albert recordó en este sentido que en los últimos 10 años se han perdido en Cataluña “100.000 hectáreas de cultivo”.

El tercer objetivo de ERC, explicó Albert, era conseguir “potenciar” el operador energético público “para desarrollar no solo la infraestructura, sino también la mayor incidencia en el despliegue de las renovables”. “Estos eran nuestros ejes para construir este decreto”, aclaró el diputado.