Así se desprende de un informe del ‘think tank’ especializado en energía Ember y dado a conocer este martes. Esta investigación concluye que muchos países ya están en camino de superar sus objetivos nacionales y que es posible lograr una mayor ambición para triplicar las energías renovables globales a su alcance.

El informe analiza los objetivos de energías renovables de 57 países y la UE, que en conjunto representan el 90% de las emisiones globales del sector energético. Según estos objetivos, la capacidad renovable mundial podría alcanzar los 7,3 teravatios (TW) en 2030, más del doble que los 3,4 TW en 2022. Más de las tres cuartas partes de la capacidad renovable provendrán de la energía solar y eólica a finales de esta década.

Según las proyecciones de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), doce países agregarán este año más capacidad renovable que el promedio anual requerido para cumplir sus objetivos a 2030: Brasil (2,9 veces más), Países Bajos (2,8), Suecia (2,7), Marruecos (2,6), Emiratos Árabes Unidos (2,3), Australia (1,3), Chile y Corea del Sur (1,2), y China España, Francia y Japón (1,1).

El actual auge de las energías renovables ya supera el crecimiento planeado por los gobiernos, pues todas las señales apuntan a una curva de incremento más rápida. Continuar con una la tasa de subida de un 17% lograda desde 2016 durante el resto de esta década colocaría al mundo en camino de triplicar las energías renovables.

OBJETIVOS “OBSOLETOS”

Por otro lado, este año 2023 marca un récord para las energías renovables. La AIE pronostica 500 gigavatios (GW) añadidos, un 71% más que el año pasado.

El crecimiento de este año estará dominado por la energía solar gracias a un aumento aún más rápido en la capacidad de fabricación de paneles solares, que se duplicó en solo dos años y se espera que supere los 1.000 GW en 2024.

El análisis de Ember encuentra que los objetivos nacionales actuales no tienen en cuenta esta reciente aceleración de las energías renovables. Un total de 22 países ya tienen suficientes proyectos de energía renovable en desarrollo para superar su objetivo para 2030. Otros 12 ya están construyendo energías renovables más rápido de lo necesario para cumplir su objetivo al final de esta década.

"Los objetivos actuales ya están obsoletos y deberían actualizarse", afirmó Katye Altieri, analista global de Ember, antes de añadir: “Los gobiernos aún tienen que entender la revolución que está en marcha con las energías renovables. A medida que nos acercamos a la COP28, los líderes deben confiar en apoyar un objetivo global de triplicar las energías renovables. Parece más posible que nunca lograrlo”.

TRIPLICAR LAS RENOVABLES

Basándose en la evidencia de la AIE y la Agencia Internacional de Energías Renovables (Irene), el presidente de la Cumbre del Clima de este año -conocida como COP28- ha pedido un acuerdo global para triplicar la capacidad renovable para 2030.

El análisis de Ember identifica que existe una brecha de 3,7 TW entre los objetivos nacionales en su conjunto y ese objetivo de triplicar la capacidad global de energías limpias (11 TW), lo que debe compensarse mediante un despliegue acelerado y una mayor ambición.

Algunos países sí cuentan con objetivos ambiciosos. Diez países, incluida la India, ya apuntan a triplicar su capacidad renovable. Doce países tienen objetivos de participación eólica y solar que superan el objetivo global de un 40% para 2030, entre ellos Estados Unidos. Otros 20 países planean cambiar más de un 20% de su combinación eléctrica de combustibles fósiles a energías renovables para 2030, incluida Sudáfrica.

Sin embargo, el informe destaca algunos países podrían intensificar sus objetivos, entre ellos Australia, Japón, Corea del Sur y Emiratos Árabes Unidos, que ya están en camino de superar sus objetivos y se encuentran entre los mayores emisores per cápita del sector energético del mundo.

"Triplicar la capacidad renovable en todo el mundo es la mayor acción que se requiere en esta década por el clima", continuó Altieri, al tiempo que agregó: "Este objetivo está a la vista si los gobiernos establecen objetivos que reflejen el ritmo actual de cambio y aplican nuevas políticas sólidas para potenciar la construcción de energía solar y eólica".