En España viven actualmente unos 2.000 "desplazados" por el conflicto de los Balcanes, a los que el Minsiterio del Interior ha prorrogado la tarjeta de permanencia por período de un año. "El tema de los refugiados", explicó Maravall, "es un problema de solidaridad social. Bajo mi punto de vista, España está capacitada para recibir un mayor número, aunque sólo deberá acoger los que la sociedad española quiera".

En opinión del director general del Inserso, "los españoles deben estar dispuestos política y socialmente a recibirlos, pero no de forma irregular, sino ordenadamente y con todas las consecuencias".

"Nuestro país", señaló Maravall, "debe ser sensible a estos temas y ant un drama como el que vive ctualmente la ex Yugoslavia no podemos poner cuotas de entrada y tampoco podemos cargar con todo el peso al Estado. Esta situación debe ser asumida por todo el conjunto de la sociedad".

RAZONES HISTORICAS

A juicio del director general del Inserso, España tiene razones históricas para seguir siendo receptiva con los refugiados, y recomendó tratar el problema con profesionalidad, "ya que se trata de colectivos muy complejos con diferencias culturales muy importantes que han enerado problemas serios en nuestros centros de acogida españoles".

"Primero está la misión solidaria de traerlos, pero hay que hacerlo bien, y no se puede cerrar los ojos a la dificultad que supone traer un colectivo marcado con un fuerte resentimeinto contra Europa", subrayó el responsable del Inserso.

En caso de que estalle el conflcito bélico, Maravall se mostró partidario de que la CE negocie unos cupos de refugiados para cada uno de los estados miembros.