En declaraciones a Radio Nacional de España en Canarias, Hernández comentó que se trató de una entrevista "que se hizo por la mañana, con luz y taquígrafos, a plena luz del día y, por tanto, no hay nada que ocultar".

Según el fiscal general, el encuntro fue propiciado por el propio Amedo "haciendo uso del derecho que le confiere el reglamento penitenciario".

Hernández especificó que accedió a recibirle "por razones humanirarias, invocaba que su mujer padecía una enfermedad grave, y en consecuencia le recibí igual que hubiese podido recibir a cualquier otro preso.

El fiscal general negó sin embargo que después de su encuentro con el ex policía llamara al presidente Felipe González para indicarle que Amedo estaba indignado por el retraso que staba sufriendo la tramitación de su indulto.

"Todo esto forma parte de la circulación periodística, pero no se corresponde con la realidad. Creo que el presidente tiene otras ocupaciones para que yo le llame inmediatamente después de una visita del señor Amedo. Niego rotundamente que esa llamada se haya producido".

Hernández manifestó que, durante su conversación, Amedo le pidió que intercediese para conseguir que le ampliasen el permiso del que disfrutaba "y lógicamente solicitaba el informe faorable del ministerio fiscal".

"A continuación, me planteó su situación familiar y personal y, por supuesto, recabó del fiscal general la tramitación del indulto que tiene solicitado, pero sin ninguna connotación extraordinaria".

El fiscal general comentó asimismo que dudaba mucho que le hubiese mostrado al ex policía su informe favorable al indulto "porque ni siquiera lo he elaborado".

Sobre la coincidencia de esta entrevista con la comparecencia en el juzgado de Baltasar Garzón de Michel Dmínguez, Hernández indicó que responde a "una simple casualidad provocada porque ambos padecen una misma situación personal, la enfermedad de sus esposas" y aseguró que en ningún momento hubo comunicación entre el ex juez y él antes de las reuniones.

Según fuentes de Radio Nacional, el fiscal general no quiso revelar la identidad del acompañante del ex subcomisario que, según el diario "El Mundo", era "un político".

Hernández quitó importancia a la intervención de este personaje del que no dio elnombre "por respeto a su intimidad".