Uno de los requisitos fundamentales para el trasladado es estar en segundo grado penitenciario y, por ejemplo, la etarra María Begoña Arroyo Pérez pasó a segundo grado el pasado 24 de junio, cuatro días antes de ser trasladada de la prsión de Alicante a la de Valladolid.

Según fuentes penitenciarias consultadas por A3TV, el cambio de segundo grado, en otros casos, se ha producido en tan corto espacio de tiempo que es imposible saber si la evolución de los presos ha sido positiva.

Esta fuentes aseguran que, en muchos casos, la selección no se llevó a cabo teniendo en cuenta el comportamiento de los presos, ya que algunos de los trasladados cometieron graves incidentes en el interior de las prisiones.

Este es el caso de Ernsto Alberdi Olano, trasladado a la prisión El Dueso desde Herrera de la Mancha. En su expediente figuran múltiples faltas; la más grave es una carta dirigida al director de la cárcel en la que lo amenazaba de muerte.