Economía circular

La Eurocámara propone reducir un 40% el desperdicio alimentario en restaurantes, comercios y hogares

- Y que los productores cubran los costes de recogida, clasificación y reciclaje de ropa usada

MADRID
SERVIMEDIA

La Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria del Parlamento Europeo acordó este miércoles elevar a un 40% la reducción per cápita del desperdicio de comida en comercios minoristas, restaurantes, servicios de restauración (comedores escolares y empresariales, hospitales, etc.) y hogares.

Además, apostó porque los productores asuman los costes de recogida, clasificación y reciclaje de productos textiles, prendas de vestir y calzado.

Ello forma parte de la propuesta de modificación de la Directiva marco sobre residuos lanzada el pasado 5 de julio por la Comisión Europea.

La UE genera cada año 60 millones de toneladas de residuos alimentarios (131 kilos por persona) y 12,6 millones de toneladas de residuos textiles. Solo la ropa y el calzado representan 5,2 millones de toneladas de residuos, lo que equivale a 12 kilos anuales de residuos por habitante. Y se calcula que menos de un 1% de todos los textiles del mundo se reciclan para convertirlos en nuevos productos.

RESIDUOS ALIMENTARIOS

La mencionada Comisión adoptó su posición con 72 votos a favor, ninguno en contra y tres abstenciones. La Eurocámara votará definitivamente su postura en una la sesión plenaria del próximo mes de marzo.

Los eurodiputados pactaron este miércoles aumentar los objetivos vinculantes de reducción de residuos propuestos por la Comisión Europea hasta al menos un 20% en el procesamiento y la fabricación de alimentos (en lugar de un 10%) y a un 40% per cápita en comercios minoristas, restaurantes, servicios de restauración y hogares (en lugar de un 30%) con comparación con la media anual entre 2020 y 2022.

Los países de la UE tendrían que garantizar que estos objetivos se alcancen en clave nacional antes del 31 de diciembre de 2030.

"Ofrecemos soluciones específicas para reducir el desperdicio de alimentos, como promover frutas y verduras ‘feas’, vigilar las prácticas desleales del mercado, aclarar el etiquetado de fechas y donar alimentos no vendidos pero consumibles”, según Anna Zalewska, eurodiputada ponente de la iniciativa.

ROPA Y CALZADO

Por otro lado, la Comisión de Medio Ambiente, Salud Pública y Seguridad Alimentaria apostó por sistemas de responsabilidad ampliada del productor, a través de los cuales los operadores económicos que comercializan textiles en el mercado de la UE cubrirían los costes de su recogida selectiva, clasificación y reciclaje.

Los países de la UE tendrían que establecer estos sistemas 18 meses después de la entrada en vigor de la directiva, frente a los 30 meses propuestos por la Comisión Europea.

Paralelamente, los países comunitarios tendrían que garantizar, antes del 1 de enero de 2025, la recogida selectiva de textiles para su reutilización, su preparación para su reutilización y su reciclaje.

Estas normas abarcarían productos textiles como prendas de vestir y accesorios, mantas, ropa de cama, cortinas, sombreros, calzado, colchones y alfombras, así como productos que contengan materiales relacionados con los textiles, como cuero, cuero regenerado, caucho o plástico.

“Subsanamos las lagunas jurídicas incluyendo también productos no domésticos, alfombras y colchones, así como la venta a través de plataformas en línea. También solicitamos un objetivo de reducción de residuos textiles, con un control de los textiles usados ​​exportados”, añadió Zalewska.

(SERVIMEDIA)
14 Feb 2024
MGR/gja