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EVITAN LA FUGA DE LA CÁRCEL DE LAS PALMAS DE UN NARCO QUE PRETENDÍA HUIR AYUDADO POR UN ZEPELÍN TELEDIRIGIDO

MADRID
SERVIMEDIA

La Policía Nacional ha frustrado el complejo plan de un destacado narcotraficante para fugarse de la prisión de Las Palmas de Gran Canaria, de donde pretendía escapar con un equipo de visión nocturna y otro de escalada que iban a hacerle llegar mediante un zepelín teledirigido.

Según informó hoy la Policía, la investigación, en la que ha colaborado la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias, ha permitido desarticular un grupo de tres personas que iba a dar apoyo al preso que pretendía fugarse.

Los detenidos pretendían usar un zepelín teledirigido para hacerle llegar un equipo de visión nocturna y material de escalada con los que llevar a cabo la evasión.

Los agentes tuvieron conocimiento el pasado mes de febrero de que varias personas podrían estar preparando la fuga de Giulio B., de 51 años y vinculado a una organización internacional dedicada a la introducción y distribución en España de grandes cantidades de estupefaciente.

PINTURA DE CAMUFLAJE

Este recluso fue detenido cuando pilotaba un hidroavión procedente de Mauritania cargado con 200 kilogramos de cocaína y actualmente se encuentra recluido en el centro penitenciario de Las Palmas de Gran Canaria.

Las primeras investigaciones permitieron identificar al equipo de apoyo con el que contaba el recluso fuera de prisión para desarrollar el plan y llevar a cabo la evasión.

Los agentes descubrieron que el grupo había remitido desde Bérgamo (Italia) un paquete con los instrumentos necesarios para la fuga. La estrategia consistía en usar por radio-control un zepelín de cuatro metros de largo, con el objeto de introducir en la celda de Giulio B. un visor nocturno, un equipo de escalada y pintura de camuflaje.

Una vez en su poder, el recluso se desplazaría hasta el lugar más elevado de la prisión para acceder a un punto concreto, previamente designado y que no contara con vigilancia, y descolgarse hasta el exterior del centro.

En ese momento un conductor lo recogería y se trasladarían hasta algún país extranjero, donde se refugiaría a la espera de conseguir documentación falsificada y continuar gestionando transportes de estupefaciente a España.

(SERVIMEDIA)
03 Jul 2009
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