El suceso ocurrió poco después de la media noche de ayer, martes, cuando por causa indeterminadas, en la "tronada" con la que los habitantes del pueblo despiden sus fiestas patronales, gran parte del material pirotécnico, suministrado por la empresa Pirotecnia Zaragozana, explosionó incontroladamente.

La onda expansiva causó destrozos de consideración en los edificios crcanos, incluida la casa consistorial, y produjo desprendimientos de cristales, cerraduras, clavos y otros de objetos metálicos y piedras, que hicieron de metralla.

La explosión, que sorprendió a la multutud concentrada en la plaza, causó heridas graves a Diego Sola Marzo, de 15 años, hijo de un concejal de San Adrián, y a otras tres personas, y de carácter leve a varias decenas más.

Después de que le atendieran de urgencia en el centro de salud de la propia localidad, Diego Sola fue trasladado a Hospital Comarcal de Estella, donde ingresó cadaver.

Murió a consecuencia de una herida penetrante en la zona del cuello, así como por diversos destrozos que presentaba en la clavícula, el paquete bascular y en el rostro, según informó a Servimedia el gerente del Hospital General de Estella, Manuel Carpintero.

Otras trece personas, lesionadas en el mismo suceso, fueron atendidas en el curso de las primeras horas de esta madrugada en el mismo centro sanitario, donde esta tarde tan sólo tres permaecían ingresadas.

Según el parte médico que Manuel Carpintero facilitó a esta agencia, José López, de 46 años, es quien presentaba un estado más grave, con una herida en la pierna derecha y pérdida de piel y sección del gemelo interno, así como el foleo. Además, perdió gran cantidad de masa muscular.

Por otra parte, Juan José Arjona Tirabo, de 14 años, sufrió una herida producida por un clavo en el brazo derecho, con trayectoria ascendente subcutanea y de pronóstico menos grave.

Con igual prnóstico, permanecía internado el joven de 15 años, Rubén Martínez Ibañez, que tiene una herida en el dorso de la mano izquierda, con rotura de tendones y extensores del segundo y tercer dedo.

Las otras diez personas trasladadas al mismo centro de Estella fueron dadas de alta en cuanto les realizaron las curas que necesitaron por cortes, desgarros y contusiones, que sufrieron por el impacto de los distintos objetos que la explosión disparó como metralla.

El resto de las personas afectadas, todas pr heridas y contusiones leves, recibieron atención en el centro de salud de San Adrián.