Los representantes de las Facultades de Bellas Artes también reiteraron en un encuentro en Sevilla su malestar y rechazo a la futura Ley e insistieron en que es “intolerable” que se traspasen unas líneas rojas “que suponen una dura agresión al sistema de calidad”. Por otro lado, anunciaron que están analizando con detenimiento las medidas que llevarán a cabo contra los “despropósitos” de esta Ley que no descartan que “finalice en los tribunales”.

En su opinión, la futura ley que se encuentra en tramitación parlamentaria, “está insistiendo en adoptar la solución más difícil, realizando una lectura y contextualización pésima del panorama europeo y provocando un grave atropello contra la Universidad, que cuenta con una regulación madura e implantada y suficientes filtros de calidad, empezando por las distintas agencias”.

Con ello se sumaron también a las críticas de CRUE, y recordaron que las universidades deben cumplir una serie de requisitos de calidad y pasar por procesos de acreditación y verificación de centros y titulaciones establecidos por la Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad de la Acreditación (Aneca) y agencias autonómicas que determinan su capacitación y acciones de mejora. Además, subrayaron que los estudios universitarios los imparten principalmente profesorado doctor e investigadores/as que deben estar acreditados por Aneca o las agencias autonómicas equivalentes y tienen que refrendar su capacidad formativa cada cinco años, y su capacidad investigadora cada seis años.

“No pueden sobrepasar límites esenciales como que los estudiantes que quieren cursar estudios universitarios deben tener el Bachillerato y superar las pruebas de acceso a la universidad”, explicaron desde la Conferencia de Decanas de Bellas Artes.