La ponencia de la subcomisión, que se reunió hoy en la Cámara Baja, tenía previsto publicar un acuerdo definitivo al respecto, lo que impidieron en el último momento las divergencias ue sostienen sobre todo el PP y el PSOE en lo referente al modo de financiar las ayudas.

En los pasillos del Congreso, los portavoces del PP, PSOE y CiU quitaron hierro a los motivos que obligaron hoy a aplazar un acuerdo y subrayaron, por encima de las distintas opiniones, que existe un consenso global sobre la necesidad de adoptar medidas para promover la familia como núcleo fundamental y primario de la sociedad.

El diputado y ponente de CiU, Manuel Silva, informó que en la reunión de hoy la sucomisión acordó admitir como texto base el borrador que se le había encargado como coordinador de la subcomisión y conceder un plazo de una semana para efectuar observaciones con el objetivo de poder acabar los trabajos el próximo 23 de abril.

María Jesús Sainz, portavoz del PP en la subcomisión, adelantó que su grupo está de acuerdo con el texto base elaborado y criticó que en la actualidad la política fiscal "está claramente penalizando a las familias con hijos" por lo que, a su juicio, "es necesari que en el marco de una reforma de la fiscalidad se produzca un cambio de esa dinámica", dijo.

Asimismo, subrayó que "es preciso adaptar la participación de las mujeres en la vida laboral activa, cuya presencia exige unas medidas de apoyo a la familia".

De acuerdo con el espíritu de esta filosofía se manifestó también la diputada socialista Belarmina Sánchez, que no obstante anunció divergencias de opiniones cuando se debatan textos legislativos concretos en el Congreso sobre vivienda, fiscalidad Seguridad Social o suelo, por ejemplo.

En opinión de la diputada del PSOE, las prestaciones económicas directas previstas por el texto base para la atención a algunos de los miembros de la familia como los niños, la tercera edad o los enfermos "son interesantes y no estamos cerrados a que eso se produzca, pero pensamos", precisó, "que este país no es rico y no podemos tomar decisiones que signifiquen una carga excesiva para las arcas del Estado".

Berlamina Sánchez expresó su temor de que un plande ayudas especialmente generoso "pueda traducirse en un detrimento económico para los sistemas de protección social ya establecidos como las pensiones, la educación o el sistema sanitario. Somos partidarios de perfeccionar los sistemas actuales y no de crear nuevos sistemas", agregó.

QUINCE RECOMENDACIONES

La subcomisión de la familia lleva dos legislaturas trabajando en el nuevo modelo de ayudas a la familia y suma alrededor de 60 comparecencias de expertos. Su principal objetivo es el de elaboraral menos quince recomendaciones al Gobierno sobre el trato a la unidad familiar, que irán desde lo puramente económico hasta aspectos sociales como el control de los contenidos televisivos y las consecuencias que los mismos pueden tener sobre la infancia.

Otras ideas que prepara la subcomisión para que en el futuro queden reguladas por ley son el fomento del reparto de tareas en el seno de la familia, medidas para corregir la violencia familiar y protección de menores.

Entre las medidas fiscales estacan las deducciones por guardería, la recomendación de ampliar la red pública de guarderías, la ampliación de los horarios escolares con actividades extraacadémicas para facilitar la compatibilidad laboral de los conyuges, que se entienda como cotizado a la Seguridad Social las excedencias por maternidad y medidas que garanticen el acceso a la vivienda.