La propuesta tiene en cuenta las recomendaciones que surgieron de la Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, celebrada el pasado mes de junio en Río de Janeiro (Brasil).

A juicio del director general de la FAO, Edouard Saouma, "es necesario actuar rápidamente respecto a los acuerdos alcanzados en la 'cumbre' de Río de Janeiro sobre conservación y utilización de los recursos fitogenéticos para la alimentación y la agricultura".

El pln de acción de la FAO contribuirá a la protección de la diversidad genética de los recursos vegetales de los países en desarrollo.

Según este organismo, la erosión genética ya ha causado la disminución de germoplasma vegetal, hasta tal punto que los cultivos son más vulnerables a los cambios climáticos o a la aparición de epidemias o enfermedades.

Por ello, la Comisión de Recursos Fitogenéticos de la FAO está intentando encontrar fórmulas que permitan asegurar el mantenimiento de la calidad genétca de las plantas y su aplicación con fines científicos.

La organización de Naciones Unidas ha advertido de los peligros que pueden amenazar el funcionamiento de los bancos de genes, como los previsibles cambios de clima, la deforestación, la contaminación o la explosión demográfica, y el riesgo de extinción de especies vegetales y de la diversidad genética.

Asimismo, la comisión tiene la intención de debatir los proyectos de dos códigos internacionales de conducta, uno sobre recolección y transfrencia de germoplasma y otro sobre biotecnología.