Macroeconomía

Fedea hace balance positivo de la economía española en el primer semestre: “Ha aguantado mejor de lo esperado”

MADRID
SERVIMEDIA

La Fundación de Estudios de Economía Aplicada (Fedea) hizo este lunes un balance positivo en términos generales de la marcha de la economía española en el primer semestre del año, que considera que “ha aguantado mejor de lo esperado, tanto en términos de actividad como de precios”.

“No sólo parece que hemos sorteado la recesión que muchos analistas preveían hace unos meses, sino que la crisis inflacionaria ha comenzado a remitir”, señala la entidad en un informe de repaso a estos seis primeros meses de 2023.

A su juicio, la buena senda de la economía nacional ha sido posible gracias a la favorable evolución de los precios energéticos, “cuyo descenso en los últimos meses ha invertido el signo del shock externo al que nos enfrentamos, reduciéndolo en un 40% desde el pico máximo alcanzado en el segundo trimestre de 2022”.

También cree que ha ayudado “el responsable comportamiento de los agentes sociales, plasmado entre otras cosas en el reciente acuerdo marco para la negociación colectiva, que apuesta por subidas salariales moderadas durante los próximos tres años”.

No obstante, Fedea advierte de que el panorama presenta “algunas sombras”, como que el crecimiento del PIB en la parte final de 2022 y comienzos de 2023 ha sido sólido, pero España ha sido de los últimos países en recuperar los niveles de actividad anteriores a la pandemia, “y en este momento ocupamos la penúltima posición de la UE en términos del crecimiento del PIB real acumulado entre el primer trimestre de 2019 y el primero de 2023”.

También llama la atención sobre la evolución del empleo, que “está siendo también mejor de lo esperado” “pero una lectura cuidadosa de los indicadores disponibles y las limitaciones de los datos existentes, especialmente sobre los trabajadores con contratos fijos discontinuos, apuntan a la necesidad de evitar lecturas triunfalistas del comportamiento de esta variable”.

“Así, mientras que el número de afiliaciones a la Seguridad Social se sitúa en torno al 8% por encima del nivel prepandemia, las horas trabajadas siguen ligeramente por debajo de esta referencia. En la misma línea, mientras que el paro registrado se situaba en 2022 claramente por debajo de su nivel de 2019 y ha continuado reduciéndose a buen ritmo en 2023, el paro efectivo (en el que se incluyen los trabajadores con contrato fijo discontinuo que se han inscrito en el SEPE como demandantes de empleo) registra una evolución muy diferente: esta variable cae entre 2019 y 2022 mucho menos que el paro registrado y repunta durante el ejercicio en curso (con respecto al mismo mes de otros años), habiendo superado el nivel de 2022 en marzo y el de 2019 en junio”, añaden los expertos de Fedea.

AYUDAS SELECTIVAS

La fundación asegura que algo similar sucede en el caso de la inflación. “Anticipándose en unos meses a sus homólogos europeos, el índice general ha caído rápidamente durante la primera parte del año, hasta situarse por debajo del 2% en el avance de junio. Sin embargo, la inflación subyacente y la alimentaria se mantienen en niveles preocupantemente elevados (del 5,8 y 8,5 por ciento respectivamente en mayo) y los tipos de interés¬¬ continúan su escalada (con el Euribor ya por encima del 4%), generando una presión creciente sobre los presupuestos familiares”, indica el informe.

Fedea también ve llamativa la evolución de los ingresos tributarios, que en los últimos años han crecido claramente por encima del PIB sin que haya habido incrementos significativos de los tipos de gravamen de los grandes impuestos, haciendo pensar que puede haberse producido “una cierta afloración de actividad económica anteriormente sumergida, quizás como resultado de un cambio de actitudes ligado a la pandemia (para asegurar el acceso a las ayudas públicas en caso de necesidad)”.

Sobre las prestaciones concedidas por el Gobierno a las familias y hogares para hacer frente a la crisis, la fundación sostiene que habría sido preferible concentrar aún más las ayudas en los hogares y sectores más afectados “mediante ayudas directas selectivas, evitando las subvenciones generales a la energía y ciertos alimentos que tienen un elevado coste y recaen en buena parte sobre hogares y empresas que no los necesitan”.

“Algo se avanzó en esta línea hace unos meses, con la sustitución de la bonificación general a los combustibles por una batería de medidas específicas dirigidas a los sectores más afectados y la introducción del cheque de 200 euros para las familias de menor renta. Los avances en esta línea, sin embargo, han sido insuficientes y no han tenido la continuidad que habría sido deseable, en parte al menos porque la cercanía de las elecciones dificulta la introducción de cualquier medida que pueda ser percibida como un recorte. Esperemos que, una vez pasados los comicios, se apueste más decididamente por la eficiencia”, remarca el informe de Fedea.

(SERVIMEDIA)
10 Jul 2023
JRN/gja