Así lo afirmó durante un mitin celebrado en Santander dentro del recorrido que está haciendo por toda España en su campaña como candidato para ser reelegido como presidente de los populares en el congreso nacional que su partido celebrará los días 4, 5 y 6 de julio para renovar la dirección y actualizar su ideario.

En este marco, Feijóo prometió como solución poner en marcha una “limpieza total” de las instituciones “con dos detergentes: honestidad y urgencia”. Pero antes, apeló a los españoles a no quedarse “quietos” y salir este domingo a las calles de Madrid para llenarlas de “verdad, honestidad y valores frente a la corrupción, la mentira y la infamia” que, a su juicio, representa el Gobierno. El objetivo, señaló, es “pedir democracia” con “tranquilidad, pero de forma clara”.

“¡Vamos a demostrar que hay una España viva, que no se rinde, que no baja la cabeza y que no se conforma; una mayoría de cambio, un clamor cívico, un grito atronador de libertad, conciencia y decencia que diga que Sánchez es pasado y que España merece ganarse el futuro!”, exclamó.

El líder de la oposición convocó en la Plaza de España a “todos los españoles decentes” y “trabajadores a los que les duele la decadencia de su país” para que “se sumen” a una “mayoría” y “alcen su voz para que la escuchen” en la Moncloa. “La única sigla, militancia y bandera”, dijo, será la de España, ya que Feijóo ordenó borrar cualquier símbolo del PP de la protesta para intentar persuadir a ciudadanos de cualquier ideología a participar en la concentración.

De hecho, no solo apeló a los votantes de PSOE y Vox, sino que también espoleó a los electores de los socios de Sánchez. Feijóo advirtió de que estos partidos son “igual de cómplices” con la corrupción que el propio Sánchez “porque temen su derrumbe democrático”. “Hace mucho que este Gobierno sobra y sus socios deberían haber dejado de ser cómplices de lo que está ocurriendo”, apostilló ante los escándalos que acechan al PSOE, con el fiscal general imputado en el Tribunal Supremo, el hermano de Pedro Sánchez a punto de sentarse en el banquillo en Extremadura y la mujer del presidente del Gobierno imputada también por un juez de Madrid.

Feijóo lamentó el “show diario y televisado de descomposición” que se está viendo a diario en el PSOE, lo que le llevó a espetar que “dan vergüenza ajena” pero a la vez a advertir de que “sus vergüenzas son las suyas” y no las del conjunto de España. “Su desvergüenza los define y sus sinvergüenzas no nos van a arrastrar a todos”, remató.

El líder del PP concluyó que el Ejecutivo de Sánchez “ya no sirve” puesto que el presidente “está escondido ante la prensa” con 37 días sin dar una rueda de prensa y “escondido de los españoles, con más soberbia que capacidad para dar una solución”. Pero insistió en que es importante que los ciudadanos cojan las “vacas por los cuernos” y salgan mañana a la calle para expresar sus ganas de cambio y su rechazo a un presidente del Gobierno cuyo “único proyecto es capear el siguiente escándalo y aguantar una semana más en el poder”.

CONGRESO NACIONAL DEL PP

Feijóo denunció que “el proyecto sanchista es un proyecto contra España” y acusó a Sánchez de dejar al país “herido en lo más profundo” por la “degradación moral” que ha generado su Gobierno y un PSOE al que le ha “expropiado” las siglas.

En este contexto, apuntó al congreso que su partido celebrará en julio como la primera meta para “reconstruir todo lo que ha destruido Sánchez”, restaurar todo lo que ha deteriorado el sanchismo” y” regenerar todo lo degradado” por el Gobierno. “Han mentido mucho, han intentado dividir a los españoles mucho y han corrompido mucho. Lo saben incluso aquellos que han votado al PSOE y están arrepentidos”, prosiguió.

Feijóo prometió “revertir cada privilegio” a los socios de Sánchez –aunque no ha detallado cuál es el plan del PP con la amnistía ante el previsible aval del Tribunal Constitucional– y “saber a dónde ha ido cada euro malgastado”. También se comprometió a que “cada institución colonizada” vuelva a estar “al servicio de los españoles”.

“Tenemos el Gobierno más caro de nuestra historia, el más inútil y el más corrupto. Pues bien, ¡se acabó la corrupción, la degradación y al indecencia! ¡Ha llegado el momento de decir basta, hasta aquí hemos llegado, este país ni se vende ni se subasta, porque es mejor que el Gobierno que padecemos!”, proclamó Feijóo antes de reclamar una movilización masiva en las calles contra un Gobierno que ha intentado convencer a los españoles de que “la mentira, el amiguismo, el enchufe, la manipulación y la corrupción son inevitables”.