“Para hacer alguna propuesta debe tener alguna legitimidad y, cuando una persona se convierte en adalid en contra de la prostitución, lo mínimo que tiene que hacer es tener la humildad para reconocer que durante una época de su vida esa prostitución le vino bien en el ámbito personal y patrimonial. Y si no le gusta, lo siento por él”, afirmó ante los medios en Barcelona. “Y eso no es ninguna crítica, es una crónica a los hechos acreditados y publicados en nuestro país desde hace una década”.

Feijóo endureció el tono contra Sánchez después de que este miércoles ya le acusara de querer “ilegalizar su biografía” tras ser “partícipe a título lucrativo de la prostitución”. El Gobierno ha salido en tromba estos días y le ha calificado como “el político más sucio de la historia” en palabras del ministro para la Transformación Digital y de la Función Pública, Óscar López.

Mientras, en Génova han justificado la reacción de su líder en los ataques de Sánchez a sus presidentes autonómicos, que no tienen ninguna “sombra de sospecha”, y aseguran que son los socialistas los que cruzaron las “líneas rojas” hace ya varios meses. Y Feijóo tildó de “insulto” que “describe perfectamente su personalidad” la respuesta de López.

Los populares han dado por buenas las informaciones periodísticas para asegurar que el piso en el que vivió Sánchez antes de mudarse a la Moncloa fue pagado con “saunas-prostíbulos” de su suegro en las había “inmigrantes jóvenes que venían a prostituirse”. Todo ello, mientras su esposa, Begoña Gómez, “regentaba” los locales, según afirmó ayer la portavoz del PP en el Congreso, Ester Muñoz.

Bajo este pretexto, Feijóo defendió que él se ha limitado a hacer “una crónica”, y no “una crítica”, sobre las informaciones de los negocios del suegro de Sánchez que se publicaron “hace más de 10 años”. Y, además, subrayó que lo ha hecho con “un nivel ético muy superior” al de Sánchez porque no mintió, sino que “simplemente” describió una situación.

Así, rechazó “lecciones de moralidad desde la inmoralidad” del Gobierno y subrayó que “la regeneración política” pasa por que “los políticos cuenten las cosas como son”, por lo que dio a entender que no retrocederá ni un paso en esta ofensiva contra Sánchez.