En sus conclusiones provisionales, además, el fiscal pide una indemnización de 15 millones para los padres del niño por imprudencia temeraria, y considera responsable subsidiaro al Español por no haber fijado en su campo las medidas de seguridad necesarias que fija la ley del deporte.

Los hechos ocurrieron poco antes de que comenzara el partido de liga entre el Español y el Cádiz el pasado mes de marzo. Guillermo Alfonso acudió al campo de Sarrià acompañado por sus padres y su hermano.A consecuencia del impacto de una bengala marina lanzada desde el otro lado de las gradas sufrió heridas mortales.

Tras el encuentro la policía detuvo a Franco Vila, de 39 años, como presunto autor de los hechos, y a José Marzán, de 59, que le acompañaba, aunque este último fue puesto posteriormente en libertad. Vila ingresó en la prisión Modelo de Barcelona, donde permaneció durante 10 días y posteriormente fue puesto en libertad condicional.