El 44% del crecimiento se ha dirigido a fondos mixtos y de renta variable. De hecho, el patrimonio total de los fondos mixtos y d renta variable era de 2,331 billones de pesetas, cuando hace ecasamente un año, a comienzos de 1996 era de 1,561 billones.

Concretamente, los fondos de inversión de renta variable pura han pasado de 496.072 millones a comienzos de este año, a los 878.683 millones de finales de febrero. Este proceso da idea del desplazamiento que se está produciendo en los últimos meses entre los ahorradores hacia la inversión en acciones.

La rentabilidad de los fondos de renta variable explica en buena medida esa tendencia. En un año, la rentabilidad media se eleva al 35,52% para este tipo de fondos, y al 24,45% para los fondos de renta variable mixta.

Por el contrario, los fondos de renta fija se sitúan en el 10,25% en el último año, y los FIAMM (corto plazo) apenas llegan a rentabilidades del 6,5% en este plazo.