En su misiva, Fraga afirma que en estos momentos la continuidad de 1.067 puestos de trabajo está pendiente de una decisión del Gobierno central, que debería facilitar una línea de crédito de 800 millones para abonar 6 meses de salarios adeudados a los trabajadores y comprar materias primas para reanudar la producción de objetos de cerámica y vidrio.

Tras una primera negatva del ICO a facilitar ese crédito, el presidente de la Xunta solicitó hoy la mediación del jefe del Ejecutivo para que se conceda y pueda aplicarse un plan de choque para resolver la supervivencia de GEA a corto plazo, a la espera de aplicar un plan de viabilidad.

Fraga le recuerda a González que, tras 14 años de titularidad sobre GEA, el INI vendió el grupo a la firma valenciana Estudesa por 100 millones de pesetas a finales del año 91. Según la Xunta, GEA facturaba en ese momento más de 3.000 milloes de pesetas al año y el INI había invertido varias decenas de miles de millones en su saneamiento.

En su escrito, Fraga afirma no comprender por qué se niega ese crédito, como paso previo a la entrada de empresarios solventes en GEA, y pide su reversión al INI, por entender que incumplió el contrato de compra-venta al no reponer Estudesa el capital social hasta mantenerlo en un mínimo de 2.000 millones de pesetas.

Por su parte, el consejero de Industria de la Xunta, Antonio Couceiro, se dirigiópor escrito también al ministro de Industria, Juan Manuel Eguiagaray, al que recuerda que el INI no puede eludir su responsabilidad sobre este grupo.

Varios centenares de trabajadores de GEA, en huelga indefinida desde hace un mes, llevan diez días acampados ante la sede de la Xunta, en Santiago, mientras cerca de otro centenar de empleados del grupo ocupan desde el lunes la sede regional del PSdeG-PSOE.