Papa Francisco
Francisco simplificó su entierro, que será junto a 'su' Virgen en Santa María la Mayor

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Los ritos de exequias y entierro de Francisco serán más sencillos que los de los papas anteriores por su propia decisión. El pontífice argentino modificó la normativa para ello y también expresó su deseo de ser enterrado en la Basílica de Santa María la Mayor en Roma, y no en el Vaticano, como la mayoría de sus predecesores.
En ese templo romano se custodia el icono bizantino 'Salus Populi Romani', que llegó a la ciudad en el siglo VI y que la leyenda atribuye a uno de los primeros seguidores de Cristo, san Lucas. Esa imagen de la Virgen de las Nieves, de gran arraigo en la capital italiana, ha sido una de las más veneradas por Francisco, ya que acudía a rezar ante ella antes de emprender y tras regresar de cada viaje y en otras ocasiones importantes. De hecho, Francisco acudió a rezar ante el icono el pasado 12 de abril, en la antesala de la Semana Santa.
El Papa argentino, fallecido este 21 de abril, será enterrado en una pequeña capilla adyacente a la capilla paulina de Santa María la Mayor que alberga la imagen de la patrona de Roma. Antes, se seguirán los pasos que marca el ritual 'Ordo exsequiarum Romani Pontificis', que regula las exequias del Papa difunto. Publicado originalmente en el año 2000, Francisco introdujo algunas modificaciones que simplifican estas celebraciones en otoño de 2024.
Entre esos cambios está la verificación de la muerte, que tiene lugar ahora en la capilla privada del Papa, en lugar de su habitación. Se da la circunstancia de que Francisco se encontraba trabajando en su escritorio esta mañana cuando comenzó a sentirse mal. La Santa Sede informó de que el fallecimiento se produjo a las 7.35 horas.
Bergoglio también eliminó la tradición de introducir su cuerpo en tres ataúdes (ciprés, plomo y roble), optando por un único féretro de madera con interior de zinc. El cuerpo del Papa será expuesto para la veneración de los fieles directamente en el ataúd abierto, sin el uso de un catafalco elevado.
El difunto papa también simplificó los títulos utilizados para referirse a él durante las ceremonias, empleando términos como “Papa”, “Obispo de Roma” y “Pastor”, en lugar de “Summi Pontificis”.
El proceso de exequias se divide en tres fases, una primera en la residencia, donde se produce la constatación de la muerte; la segunda arranca en el traslado a la Basílica de San Pedro para que los fieles puedan despedirse del Papa; y la tercera etapa es el entierro en Santa María la Mayor.
(SERVIMEDIA)
21 Abr 2025
AHP/clc