EL FRENTE POLISARIO TEME "UN BAÑO DE SANGRE" SI NO SE APRUEBA UN REFERENDUM DE AUTODETERMINACIÓN - Abdelaziz juzga "deliberadamente contraproducente" la política española, pese a la solidaridad ciudadana
- Denuncia el "silencio" del Gobierno ante las violaciones marroquíes del derecho internacional
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El secretario general del Frente Polisario y presidente de la República Arabe Saharaui Democrática (RASD), Mohamed Abdelaziz, aseguró hoy que teme "un baño de sangre" entre su pueblo si no se aprueba un referéndum para su libre autodeterminación y prosiguen los hostigamientos de Marruecos.
En un encuentro organizado por el Foro "Nueva Economía", Abdelaziz alertó de que la "intifada saharaui" ha demostrado la urgencia de una solución "justa y definitiva" al conflicto que se vive desde la ocupación marroquí de la antigua colonia española.
Esa solución, sentenció, debe llegar "antes de que la dinámica acción-reacción degenere en un baño de sangre que haría extremadamente difícil la viabilidad de las perspectivas pacíficas hasta ahora mantenidas sobre la mesa".
Como muestra de ese riesgo, recordó las reiteradas expulsiones de delegaciones que pretendían comprobar la situación de los refugiados, y la reciente detención por parte de Marruecos de un ciudadano saharaui que se había refugiado en unas antiguas dependencias españolas.
Aseguró que el mismo ciudadano fue detenido hace tres semanas y brutalmente torturado por una sección del ejército marroquí ante el "silencio" de las autoridades españolas, "intolerable" para los saharauis.
BRAZOS CRUZADOS
Abdelaziz recordó que el llamado "plan Baker" patrocinado por la ONU fue aceptado por Marruecos, país que después se opuso a su aplicación. La situación, añadió, no puede ser sostenida por más tiempo por la comunidad internacional.
"No podemos sencillamente esperar con los brazos cruzados cuando estamos viendo que todos los caminos propuestos por las Naciones Unidas, algunos de ellos con el consentimiento formal de Marruecos, se están cerrando en el horizonte", explicó.
Precisó que los saharauis no desean "el camino de la violencia, el retorno de la guerra", pero auguró que el "statu quo" vigente conduce "a una represión cada vez más brutal en las zonas ocupadas, o a un retorno de las hostilidades, o a ambas cosas a la vez".
Ante un aforo netamente español, Abdelziz denunció que la política española y también de Francia hacia el Sahara ha sido "deliberadamente contraproducente" por basarse en los beneficios económicos obtenidos del conflicto.
"Algunos de ellos ilegales, como los acuerdos pesqueros, otros derivados de la lógica de la tensión, como la venta de armamento", precisó.
Con esta denuncia explícita por medio, Abdelaziz lanzó un llamamiento a la Unión Europea para que no firme con Marruecos ningún tipo de acuerdo, tampoco pesquero, que afecte a la soberanía saharaui o contribuya a seguir "saqueando" sus recursos naturales.
Al conjunto de esa comunidad internacional, pero sobre todo a España, Abdelaziz advirtió de que sólo un referéndum libre de autodeterminación solucionará el conflicto, y de que todas las demás alternativas han fracasado en el pasado.
Pero, además, dejó caer la idea de que a España le interesa, en todos los ámbitos, un Magreb más plural en el que pueda tener relaciones bilaterales también con un Sahara independiente, más allá de que ese objetivo sea "una deuda moral y política" para España.
DIPUTADOS ESPAÑOLES
Abdelaziz expuso con pasión y detalle algunos ejemplos de lo que considera "indiferencia" española, como es el hecho de que los saharauis deban enviar a sus hijos a Cuba o México a estudiar español pese a la cercanía geográfica con la cuna de esa lengua.
La emotividad del discurso de Abdelaziz llevó a los asistentes a aplaudir de forma espontánea algunas de sus afirmaciones, y también provocó cierta tensión entre los parlamentarios y dirigentes de distintos partidos españoles presentes en la conferencia.
Todos ellos están pendientes de la decisión que tome la Mesa del Congreso de los Diputados sobre la visita al Sahara a la que han sido invitados por Marruecos y que, por el momento, ha sido rechazada por escasez de garantías de poder visitar a los refugiados.
El coordinador general de Izquierda Unida, Gaspar Llamazares, tomó la palabra para expresar su "incomodidad" con la política española ante el Sáhara, y lo mismo hizo después el consejero vasco de Justicia, Joseba Azcárraga, en nombre también de su partido, Eusko Alkartasuna.
Azcárraga aseguró que la autodeterminación es la única salida a los conflictos, ya sea "en el Sahara, en Palestina, en Irlanda y en mi propio país", una afirmación a la que Abdelaziz eludió entrar.
Posteriormente fue el socialista José María Benegas quien intervino, precisando que no representaba al Gobierno sino que lo hacía como vicepresidente de la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados.
Benegas se mostró comprensivo con la indignación mostrada por Abdelaziz ante la situación del pueblo saharaui, pero le recordó que la celebración de un referéndum de autodeterminación no depende únicamente de la voluntad de España, sino de un acuerdo entre las partes y de la decisión de la ONU "de hacer cumplir sus resoluciones".
Negó, además, que el Gobierno haya mantenido silencio ante la detención del ciudadano saharaui en las antiguas dependencias españolas, y aseguró que se ha formulado una protesta y se ha alertado de que España vigilará la integridad física del detenido. Finalmente, le deseó a Abdelaziz mucho éxito y que algún día su pueblo pueda tener un estado independiente".
(SERVIMEDIA)
12 Jul 2005
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