Según informaron fuentes judiciales, Gómez de Liaño, encargado de resolver el incidente por ser el sustituto legal de Garzón, rechaza de este mod que exista enemistad manifiesta del juez hacia el ex ministro, tal como sostuvo éste en su recusación.

Corcuera basó su recusación en la enemistad que Garzón le profesa y argumentó este extremo en numerosas informaciones periodísticas que recogían las discrepancias entre el ex ministro y el juez durante la etapa en que éste último estuvo en la política.

En un auto notificado hoy a Garzón, Gómez de Liaño tampoco ve motivos para imponer a Corcuera una sanción por haber presentado el incidente, al gual que ocurrió con la recusación que Vera presentó contra el magistrado el mismo día que el ex ministro del Interior.

En ninguno de los dos incidentes, el fiscal del caso solicitó a Gómez de Liaño que sancionase a los recusantes dado que, a su juicio, actuaron al presentar las recusaciones dentro de sus derechos.

Una vez resueltas ambas recusaciones, el 'caso Oñaederra' vuelve a manos de Garzón, quien tuvo que paralizar la instrucción de la causa durante las dos semanas en que duró la tramitacin de los incidentes.

De acuerdo con las mismas fuentes, una de las primeras diligencias que el juez podría acordar son las citaciones como imputados de Vera y Corcuera, comparecencias que estaban previstas para el pasado día 25 de octubre, pero que fueron suspendidas al presentar ambos sendas recusaciones.

El magistrado pretendía interrogarles sobre una supuesta operación consistente en el secuestro de un GRAPO con el fin de obtener información sobre esa organización terrorista, acción que el ex irector general de la Guardia Civil Luis Roldán atribuyó a Corcuera y Vera, con quienes el magistrado podría someterle a un careo.