Según explicó el ex responsable de Interior, un amigo común que visitó ayer al ex director general de la Seguridad Julián Sancristóbal, en la cárcel de Alcalá-Meco, le comunicó que el detenido no le había desmentido.

Vera insistió en que "desde la cárcel es difícil decir algo" y atribuyó el desmentido a la estrategia e defensa del abogado de Sancristóbal.

El antiguo secretario de Estado para la Seguridad piensa seguir adelante con la querella que presentó contra Garzón, en la que sostiene que el juez ofreció a Sancristóbal dejarle en libertad provisional si se autoinculpaba o acusaba a sus superiores.

"Yo mantengo los testigos de referencia que cito en la querella y estoy seguro de que tengo base legal suficiente para demostrar lo que digo; si no, no la hubiera presentado", indicó Vera a Servimedia.

El e responsable de Interior sostiene que el diputado del PSOE José María Mohedano y la concejala socialista del Ayuntamiento de Madrid Ana Tutor fueron testigos de una conversación en la que el abogado Stampa Braun narró las presiones a las que fue sometido su defendido.

Vera confirmó a esta agencia que los dos testigos citados en su querella están dispuestos a testificar la veracidad de sus acusaciones contra el juez Garzón.