Esta es la valoración del alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, tras conocer la sentencia del Juzgado de lo Penal número 6 de Madrid que condena al periodista de la Cope Federico Jiménez Losantos a pagarle 36.000 euros por injurias graves.

Gallardón, que aseguró no haber leído todavía la sentencia y que sólo conocía el fallo, hizo estas declaraciones a la prensa tras la firma de un protocolo con el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, que define el futuro de los terrenos de la antigua cárcel de Carabanchel.

"Del fallo, lo que puedo decir es que en su momento solicité amparo judicial a quien corresponde hacerlo en un Estado con derecho, que es a los tribunales de justicia, porque consideré que se había producido una lesión grave de mi honor realizando unas afirmaciones que, además de falsas, yo consideraba que eran injurias", explicó, y "ese amparo se ha producido como consecuencia de la denuncia".

Señaló que las sentencias siempre hay que respetarlas y acatarlas, por lo que aseguró que fuera cual fuera el contenido del fallo judicial, "hubiese tenido el mismo respeto que yo manifiesto ahora".

Para Gallardón, cualquier ciudadano, "al margen de que ocupe un cargo público", cuando siente lesionado su honor tiene un sistema de respuesta que en un Estado de derecho corresponde a los jueces y tribunales. "Yo consideré que esa lesión se había producido, he solicitado ese amparo y ese amparo se ha producido", concluyó.

Por su parte, el ministro Rubalcaba, que fue preguntado por la sentencia en la rueda de prensa posterior a la firma del acuerdo con el alcalde, indicó que "personalmente, y desde luego como Gobierno, nunca comento una sentencia. Siempre utilizo dos verbos, que son respeto y acato, que son los verbos que corresponde", afirmó.