Así lo afirmó Alegría en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros celebrada en Moncloa, en la que aseguró que se reunirán con los socios de Sumar aunque dijo que ya lo hacen "a diario" y también con aquellos que apoyaron la investidura de Sánchez porque "lo que tenemos enfrente es la posibilidad de esa unión que estamos viendo en ayuntamientos y comunidades autónomas, de gobiernos de la derecha y de la ultraderecha que el único interés que tienen es retrotraer los avances que entre todos hemos conseguido".

Para Alegría, "es fundamental" seguir avanzando y afirmó que "con este Gobierno progresista creo que las políticas que hemos aprobado durante todo este tiempo le han sentado bien a nuestro país y están beneficiando a los españoles". Por ello, eludió hablar de crisis o ruptura, y tampoco de la posibilidad de que la legislatura termine ante las exigencias de Sumar.

La vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, pidió hoy una reunión "urgente" con sus socios de Gobierno tras pedir "cambios" en el Ejecutivo y "acordar qué medidas sociales y en defensa del derecho a la vivienda impulsaremos" para continuar la legislatura. Alegría, por su parte, defendió que, "desde luego, nosotros hablamos y dialogamos con todas las fuerzas parlamentarias, lo venimos haciendo desde el inicio de la anterior legislatura y por supuesto también en esta pero, especialmente, como no puede ser de otra forma, con nuestros socios de gobierno, con Sumar".

"Lógicamente, somos dos partidos políticos distintos pero, a pesar de alguna cuestión de que hayamos podido tener opiniones diferentes, nosotros siempre hemos escuchado los planteamientos y las opiniones de Sumar con el máximo respeto", respondió Alegría para añadir que "lo verdaderamente importante es no perder el objetivo, no perder el horizonte, porque quedan todavía dos años de legislatura para seguir trabajando para la gente, especialmente para la gente de a pie".

El primero en demandar esta cita fue ERC y el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aceptó que se reunirá con su líder Oriol Junqueras para, horas después en un corrillo con periodistas sentenciar que mantendrán esa reunión, pero que el organizar la cita es cosa suya. Es decir, el jefe del Ejecutivo está dispuesto a reunirse con sus socios de Sumar y también con aquellos que votaron su investidura, pero los tiempos los pondrá él.

Por su parte, sobre el Gobierno, el exlehendakari Iñigo Urkullu sentenció ayer que "la situación es insostenible" en un coloquio en el hotel Ercilla de Bilbao en el que se encontraba el presidente del PNV, Aitor Esteban, junto a empresarios. Sin embargo, al ser preguntado más tarde, Sánchez 'quitó hierro' a este comentario señalando que habla mucho con Esteban y entiende "su incomodidad" respecto a los casos de acoso que han ido saliendo relacionados con el PSOE.

Sánchez buscará estas reuniones con los socios para cerrar así las crisis causadas por los casos de acoso sexual que han ido saliendo estas semanas y por presunta corrupción que afectan a su entorno y a su partido para seguir apuntalando la legislatura asegurando que presentará unos Presupuestos Generales del Estado para 2026 y que ve "una ventana de oportunidad" con Junts de que sean aprobados si él cumple con los acuerdos alcanzados y que todavía quedan por sacar adelante de su investidura. Fuentes del Ejecutivo insisten a Servimedia en que se ven "fuertes" y "con ganas" para seguir adelante.