Así lo indicó durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno de la Comunidad de Madrid, donde recordó que la Unión Europea ha reconocido a la energía nuclear como energía verde y añadió que “no hay ningún país de nuestro entorno que esté dando marcha atrás en lo que tiene que ver con la apuesta por la energía nuclear”.

El portavoz del Gobierno que dirige Isabel Díaz Ayuso lamentó que, “teniendo distintas centrales nucleares que podrían seguir en servicio durante mucho más tiempo, por esa cuestión totalmente sectaria e ideológica y por los peajes que tiene que pagar a aquellos partidos que le permiten mantenerse en La Moncloa, nos estamos pegando un tiro al pie con ese calendario de cierre de centrales nucleares que le van a dar estabilidad al suministro eléctrico en nuestra región”.

García Martín hizo estas declaraciones “en un contexto donde hemos sufrido un apagón total hace más de una semana” y donde “todavía a estas alturas seguimos sin tener ningún tipo de explicación”. En este sentido, criticó que la única explicación que da el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “es tratar de echar culpas a todo el mundo: a las eléctricas, a los lobbys, a cualquiera que se le ocurra, para no asumir su propia responsabilidad y su propia ineficacia e incapacidad para abordar los problemas”.

En rueda de prensa, el portavoz madrileño incidió en que “lo grave no es que nuestro país se fuera a negro”, sino que “lo grave es que no conoces las razones”. De este modo, continuó, “no conociendo las razones por las que nuestro país se fue a negro, esto puede volver a ocurrir como ya advirtieron algunos antes del apagón”.

Por tanto, “creo que deberían abandonar el sectarismo, deberían abandonar la ideología, ver lo que está ocurriendo en los países de nuestro entorno y apostar por un mix de energía en nuestro país que cuente con la energía nuclear para dar estabilidad, para dar certidumbre y para mantener los precios”, remarcó García Martín.

Además, añadió que, “lógicamente, si sacamos de la ecuación a la energía nuclear, quien va a pagar el pato son los españoles, que van a ver cómo el coste de la energía se va a incrementar y la estabilidad de la propia red y el suministro se va a ver muy comprometido”.