Así lo manifestó Escrivá durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, en la que mostró su preocupación por el hecho de que existan estudios que apunten a que en torno a siete de cada diez menores confiesa acceder a pornografía.

Dicho grupo de trabajo estará liderado por el Ministerio de Transformación Digital y de la Función Pública, aunque también participarán los Ministerios de Juventud e Infancia e Interior.

También formarán parte la Agencia Española de Protección de Datos, “que es la que tiene que garantizar la privacidad” de esta tecnología, y la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC), quien “tendrá que dar la certificación final de la tecnología”.

Igualmente asistirá a las reuniones la Fábrica Española de Moneda y Timbre, que va a ser la emisora de las credenciales verificables, tal y como detalló el ministro.

Escrivá se alineó con los postulados del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y de la Unión Europea, encaminados a que se demuestre la edad para acceder a estos contenidos pero manteniendo el anonimato de la identidad. Así, incidió en que, garantizando ese anonimato, el modo de probar la edad debe generar “las suficientes garantías”.

CARTERA DIGITAL

Explicó que se trata de una cuestión que “trasciende a España” e incluso a Europa. No obstante, indicó que en la UE se está desarrollando la Cartera Digital Europea que regula el Reglamento de identidad digital europea que ha aprobado ya el Parlamento Europeo y que está a punto de ser aprobado también por el Consejo de la UE.

“España está liderando todos los trabajos técnicos que acompañan el desarrollo de esta regulación y eso nos va a permitir ser pioneros y poder disponer de la tecnología en el ámbito de la identificación de la edad muy pronto”, prosiguió el ministro.

En este sentido, comentó que esa Cartera Digital Europea va a permitir “demostrar nuestra identidad” y que “tengamos documentos electrónicos desde esta cartera de identidad que estará residenciada en nuestros móviles”.

“Y aquí es donde es posible anticiparse para que esta tecnología se pueda utilizar lo antes posible. Pensamos que claramente durante este año puede estar disponible en España para la verificación de la edad, que es un elemento central”, agregó Escrivá.

Al respecto, destacó que está previsto que a nivel europeo estas tecnologías sean de obligado cumplimiento a partir del año 2026 pero aclaró que “podemos ir más deprisa”. Y es para este objetivo para el que, según el ministro, se ha creado el grupo de trabajo interministerial.