El Consejo de Ministros inició el pasado febrero los trámites para el derribo del hotel ilegal de El Algarrobico, ubicado en Carboneras y en pleno Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar (Almería), al adoptar la declaración pública de los terrenos y bienes situados dentro del dominio público marítimo-terrestre (cerca de un 40% de los terrenos) como paso previo a su expropiación, demolición -que costeará el Gobierno con siete millones de euros- y recuperación de ese paraje natural.

La declaración de utilidad pública es un primer paso antes de un acuerdo urgente de ocupación e hitos administrativos hasta la expropiación y la demolición del hotel, cuya construcción se inició en 2003 sobre terrenos no urbanizables en el término municipal de Carboneras.

La Junta de Andalucía ha manifestado que el Gobierno ya rechazó la expropiación de los terrenos en 2009 (con José Luis Rodríguez Zapatero como presidente) y también el año pasado (con Pedro Sánchez en La Moncloa), y apostó por la nulidad de la licencia de obras, ya que expropiar la finca podría ser objeto de recursos judiciales y la empresa Azata es propietaria del hotel ilegal.

“OPTIMISTA”

El 60% del edificio está fuera de la zona de dominio público marítimo-terrestre y pertenece al mencionado parque natural, cuyas competencias ostenta la Junta de Andalucía.

El Gobierno y la Junta de Andalucía firmaron en 2011 un protocolo para la protección de la playa de El Algarrobico, con el que el Ejecutivo central asume los gastos de demolición y el autonómico, el desescombro y la gestión de los residuos.

“Soy optimista, espero que lleguemos a ese acuerdo. La sociedad lleva mucho tiempo esperando a que se tomen acciones. Nosotros, desde la Administración General del Estado, entendimos que teníamos que actuar y la vía de actuar era donde tenemos competencias, en el dominio público marítimo terrestre”, apuntó Aagesen en un encuentro organizado por la Cadena Ser Andalucía y celebrado en Sevilla.

Aagesen insistió en que su departamento ha pedido a la Junta de Andalucía que actúe “de manera complementaria en la parte que es de su competencia, que es el parque natural”.

“Tengo esa esperanza. Desde aquí también llamo a la Junta a que se sume”, comentó, antes de considerar “totalmente absurdo” y una “aberración” que se derribe cerca de la mitad del hotel por ser competencia del Estado y no la otra parte, al ser competente el Gobierno andaluz. “Nosotros vamos a actuar donde somos competentes. Aunque, insisto, parecería totalmente absurdo”, concluyó.