Inmigración

El Gobierno estudia aprobar vía decreto la cesión sobre inmigración si decae en el Congreso

MADRID
SERVIMEDIA

El 'ala socialista' del Gobierno asume que Podemos tumbará la semana que viene la cesión migratoria a Cataluña y ya se encuentra estudiando una vía alternativa para sacar adelante los puntos más importantes que demanda Junts vía decreto ley para cumplir con lo acordado con Carles Puigdemont.

El Ejecutivo asume una nueva derrota parlamentaria, tras ver tumbada la semana pasada la reducción de la jornada laboral. Así y en previsión, la Cámara Baja no aprobará la proposición de ley que los socialistas firmaron con Junts para delegar las competencias en materia migratoria a Cataluña. Una votación que no cuenta con los apoyos suficientes y que sigue en manos de Podemos, quien califica la iniciativa de "racista".

Fuentes del PSOE aseguran que "no está en nuestra mano" que salga adelante la iniciativa y consideran que "la cosa está difícil" a la hora de convencer a Podemos. "Nosotros sí que hemos cumplido facilitando el camino para su tramitación. Podemos es el que no está de acuerdo", señalan y consideran que ambos "deberían encontrar una carta con la que los dos puedan sacar algo".

Sin embargo, son conscientes de que el cumplimiento de este compromiso les 'salpica', en el sentido de que es una premisa exigida a Sánchez por los posconvergentes para avanzar con el Ejecutivo en otros temas como es la negociación de los Presupuestos del Estado para 2026.

Por ello, fuentes gubernamentales estudian una vía alternativa, por si decae esta semana la proposición, mediante la aprobación vía decreto de los aspectos más importantes que habría demandado Junts y que dieran por cumplido su acuerdo. "Si decae intentaremos sacar aquellas cosas que no requieran de rango de ley, vamos, como hemos hecho con otras propuestas. Extraemos las medidas parlamentarias y hablamos con los grupos", desvelaron. "Así podemos conseguirles cosas que les compensen", añadieron.

Cabe recordar que Junts llegó a presentar una proposición no de ley, en la que exigió a Sánchez que se sometiera a una cuestión de confianza. La Moncloa prometió este traspaso en enero del año pasado, cuando los votos de Junts fueron indispensables para aprobar tres reales decretos ley. La formación de Carles Puigdemont aprovechó esta semana su cupo en la Junta de Portavoces para que el asunto se discuta la semana que viene en la Cámara Baja.

Fuentes parlamentarias explican a Servimedia que "era eso o nada", ya que Junts no tenía otra proposición de ley en cola que pudiera sacar a relucir en su cupo. Y ahora la decisión supone otra prueba para los socialistas con la reunión esta misma semana entre el expresidente José Luis Rodríguez Zapatero y Puigdemont en Suiza para revisar los acuerdos del pacto y las medidas, como ésta, que quedan pendientes por cumplirse a cambio del apoyo de Junts a la investidura de Sánchez y así poder avanzar y comenzar a hablar de la senda de déficit y de Presupuestos.

POSICIÓN DE JUNTS

Por su parte, fuentes de Junts aseguraron que intentaron negociar esta iniciativa con Podemos, pero que este partido rechazó sentarse a dialogar. Tras conocer la negativa de esta formación, los de Carles Puigdemont pidieron hablar para intentar que cambiara de idea, pero finalmente no llegaron a reunirse nunca.

Pese a ello, las citadas fuentes destacaron que aún quedan algunos días por si Podemos accede a hablar con este partido. Sí mostraron su enfado con el hecho de que un partido que ni siquiera tiene representación en el Parlament catalán vaya a vetar este tema, que cuenta con un “amplio consenso social” en Cataluña.

Al mismo tiempo, manifestaron que no saben hasta qué punto el PSOE tiene capacidad de negociación con Podemos para que cambie su postura frente a la proposición de ley. Añadieron que si los de Belarra están en el “no” el martes acabarán votando “no”, pero apuntaron que ya verán cómo explicaron a los catalanes que votaron junto a PP y a Vox.

(SERVIMEDIA)
21 Sep 2025
NVR/BMG/nbc/gja