Del total de la inversión, las tres cuartas partes han sido para la construcción de nuevas bibliotecas públicas y renovación y mejora de dotación de las ya existentes.

A los 125 millones de euros que ha gastado el Estado en el plan hay que añadir otros 14 millones más que ha portado el sector privado, lo que representa un 10 por ciento de la cifra global.

Del Castillo aseguró que este proyecto ha constituido "una línea fundamental de la política cultural" del Ejecutivo durante esta legislatura, por la importancia que otorga a la lectura para la formación de las personas y el desarrollo cultural de un país.

Según la ministra, el plan se encuentra entre los más avanzados de Europa y prueba de su calidad es que varios países iberoamericanos como México lo han tomado com referente.

Aseguró que este plan dará sus frutos a "largo plazo", por lo que no hay que esperar que los porcentajes en los índices de lectura hayan mejorado. "La sedimentación de hábitos requiere tiempo", señaló.

Según los últimos estudios oficiales sobre esos hábitos, en torno al 40 por ciento de la población no coge nunca un libro. La novela histórica es el género prefido y los jóvenes son los más aficionados a la lectura, de acuerdo con los datos ofrecidos hoy por el director general del Libr, Fernando de Lanzas, quien dijo que en este último trienio sí se ha percibido "un mayor protagonismo cultural de la lectura".

Entre las acciones del plan ha figurado la impartición de cursos de formación de hábitos de lectura a 2.248 profesores y la participación de casi 2 millones de alumnos en el programa escolar "Viaje al mundo del libro".

La evolución presupuestaria del plan ha sido la siguiente: 25,7 millones de euros en 2001; 29,3 millones en 2002, 32,7 en 2003 y 39 millones previstos para2004.