Rodríguez se refirió a este asunto en declaraciones a los periodistas tras visitar el Ayuntamiento de Ciudad Real y la librería Serendipia de esta ciudad.

Respecto al incidente en el homenaje del 17-A, la portavoz señaló que, aunque “minoritario”, fue un episodio “lamentable”.

Frente a este tipo de actuaciones, Rodríguez reivindicó “la unidad de los demócratas, el acompañamiento a las víctimas que sufrieron ese lamentable atentado y, desde luego, la repulsa a ese tipo de comportamientos, tanto de ciudadanos como de responsables políticos que también se sumaron a ellos”.

La referencia de la ministra a los “responsables políticos” que apoyaron a los autores del boicot aludía a la expresidenta del Parlamento catalán Laura Borràs, quien acudió a saludar al grupo de personas que lanzaron consignas contra el Estado y sugirieron su implicación en los atentados del 17-A, comportamiento que fue expresamente rechazado por otros dirigentes independentistas.